El Grupo Ureta Tizona Burgos y el internacional brasileño con pasaporte portugués Caio Pacheco (22 de febrero de 1999, São Paulo, Brasil) han llegado a un acuerdo para la vinculación del combo guard hasta el final de temporada. Puede ocupar las posiciones de base y escolta y ya conoce la LEB Oro, pues hasta hace solo unos días militaba en el Real Betis Baloncesto.
De hecho, Pacheco anotó 17 puntos en el amistoso de pretemporada disputado entre el Tizona y el conjunto sevillano en el Polideportivo El Plantío, y comenzó el curso con el conjunto bético, pero en el segundo partido se lesionaba el tobillo derecho, en el que sufría la rotura parcial de su ligamento anterior. Fue a finales de octubre y desde entonces ha permanecido en Sevilla recuperándose. Ya recuperado, y de forma sorprendente, el Betis anunciaba que prescindía del jugador y le daba la baja.
José Manuel Naveira, director deportivo del Grupo Ureta Tizona, valora el fichaje de Caio Pacheco por el club burgalés. “Pacheco es un jugador con grandes condiciones físicas y técnicas, que viene a reforzar nuestra rotación exterior. Tiene mucho ritmo en el juego, una gran capacidad de lectura ofensiva y defensiva.”
Pacheco tuvo su primera experiencia profesional en el Bahía Basket argentino, con quien estuvo vinculado desde 2018 hasta 2021. En ese tiempo, además, firmó una cesión de un mes por el UCAM Murcia de la Liga Endesa. Sus siguientes dos temporadas son en el baloncesto europeo, primero en el Victoria Libertas Pesaro de la Serie A (primera división italiana), para salir posteriormente al MKS Dabrowa Górnicza polaco.
Por último, la temporada pasada la disputó con los Capitanes Ciudad de México de la liga de desarrollo de la NBA, la G-League. Sobre el currículum de Caio Pacheco, Naveira comenta que “su experiencia nos convence para fichar a un jugador que además de su presente creemos que tiene un gran futuro, y que puede encajar muy bien en nuestro equipo, en cuanto a mentalidad, intensidad e identidad. Estamos muy satisfechos de haber podido llegar a un acuerdo con el jugador».
