Ha pasado poco más de un mes desde que echase a rodar la nueva temporada 2024-2025 del Club Ciclista Arandino en sus distintas secciones. Como es habitual, quienes más días han acumulado ya son los más pequeños de la Escuela de Ciclismo TecVir-Cárnicas de Gumiel. Una Escuela que, pese a tener a los más jóvenes aficionados a las dos ruedas, es la más “vieja” del club, con su origen en la década de los años 90, en paralelo al inicio de la andadura de la entidad en 1987.
Todavía con Jornadas de Puertas Abiertas a las que cualquier niño/a puede asistir, dedican los martes y jueves, de 18.30 a 19.30 horas, a dinámicas y juegos, así como a acondicionamiento físico general. Mientras, los domingos son para las salidas con bici de montaña o senderismo en horario matinal.
Más adelante llegará el momento de las competiciones de bici de montaña, carretera y pista para quienes así lo deseen, pero los principales objetivos alejados de lo competitivo se van alcanzando en un grupo que está abierto a nuevas incorporaciones.
Los júnior del Recambios Callejo avanzando en sus entrenamientos
Tras las primeras jornadas de entrenamientos y concentraciones sin trabajo específico de bicicleta, el equipo junior del Recambios Callejo (ciclistas de 16-18 años) ya rodó en Aranda de Duero y la comarca ribereña este pasado fin de semana. Es una plantilla de 15 corredores cargada de juventud (11 son de primer año), y a su vez de ilusión y ganas de ser combativos en una temporada que se presenta ambiciosa para el equipo arandino.
No en vano, el equipo es de los más veteranos en el panorama nacional (el primer año con equipo júnior en el Club Ciclista Arandino fue 2007) y recibe invitaciones de la práctica totalidad de pruebas celebradas en el territorio nacional, incluidas las más prestigiosas vueltas por etapas, y también de Portugal, donde en 2024 hubo ya 3 participaciones.
Ahora sus corredores tendrán descanso antes de una segunda concentración de pretemporada que tendrá como centro de operaciones el albergue de la Junta de Castilla y León en Miranda de Ebro, aprovechando el puente festivo del 6 al 9 de diciembre.
