Burgos, como todas las ciudades y pueblos de España, no puede celebrar durante estos días su emotivas procesiones de Semana Santa debido al confinamiento al que estamos todos obligados por la pandemia del COVID19, pero esto no fue obstáculo para que este jueves, en el Barrio de Vista Alegre de la capital burgalesa, más conocido como G3, celebraran su particular procesión de El Encuentro.
Protagonizada por dos familias -viven en sendos quintos pisos- de la calle Victoria Balfé, e impulsada por el atleta burgalés Pablo Sánchez (Atletismo Numantino), último ganador de la San Silvestre Cidiana, ambas asumieron el papel de las cofradías de la Parroquia de San Gil (paso de Nuestra Señora de los Dolores) y la Parroquia de San Cosme y San Damián (Jesús con la Cruz a Cuestas).
Y así, con sendos pasos confeccionados manualmente y enganchados a un cable, obraron El Encuentro -en este caso aéreo- entre Jesús y su madre, la Virgen María, para disfrute y asombro de los numerosos vecinos de la calle Victoria Balfé que contemplaron la procesión desde sus ventanas y balcones.
Antes de su inicio, Pablo Sánchez leyó el siguiente escrito para que todos los vecinos entendieran la intención de él y su familia y se sumaran a la celebración con respeto:
«¡Hola, vecinos! Hoy, como todos sabemos, es Jueves Santo, y este vecindario no podía quedarse sin su procesión. Quiero recalcar que este acto se hará con absoluta seriedad y respeto, ya que no queremos, ni mucho menos, ofender a nadie. Es un homenaje para todas esas personas que ya no están, para las que están luchando para que podamos librarnos cuanto antes de la enfermedad que nos tiene a todos en nuestras casas, y también para todos nosotros, vecinos».
