El entrenador del Burgos CF, José María Salmerón, ha aprovechado este viernes la fuerza de las redes sociales para hacer pública una carta de su autoría a través de su cuenta oficial de Twitter, escrito en el que deja patentes una serie de peticiones que, en su opinión, deberían tenerse en cuenta para que existiera un mejor trato hacia la Segunda División B.
Sin mencionar en ningún momento a la Real Federación Española de Fútbol, sin aludir a la Primera y la Segunda División, sin referirse tampoco a la Liga de Fútbol Profesional (LFP), en la que no tienen cabida los clubes de Segunda B, Salmerón no da puntada sin hilo y en ocho párrrafos sin desperdicio realiza un repaso detallado por las particularidades de la categoría de bronce, que, según señala, no son muy distintas a las de las categorías superiores.
Además, y ante la incertidumbre que ahora mismo sobrevuela sobre la Segunda B, desconociéndose en estos momentos si se reanudará la competición y, en ese caso, cuántos clubes volverán a jugar -¿los 4 primeros de cada grupo, los 6 primeros o todos-, Salmerón aboga por el derecho a «tener todos las mismas oportunidades de cumplir sueños» y «el derecho de poder trabajar».
Sin más, recogemos a continuación de forma íntegra la misiva de José María Salmerón, entrenador del Burgos Club de Fútbol.
CARTA DE JOSÉ MARÍA SALMERÓN (ENTRENADOR DEL BURGOS CF):
«Hola. Soy entrenador del Burgos CF en Segunda División B, y quiero pronunciarme acerca de la situación que estamos viviendo los profesionales de mi categoría en este deporte.
En mi caso, he militado en todas las categorías del fútbol a nivel profesional, actualmente como entrenador y anteriormente como jugador. Ahora, pertenezco con orgullo a esta categoría a la que dedico el mismo tiempo y esfuerzo que en cualquier otra.
Mi dedicación y responsabilidades son las mismas que en las categorías inferiores, y en este tiempo no he sentido que se nos tuviera en cuenta en la misma manera en ningún plan de actuación para volver a la normalidad, sintiéndome desprotegido. Y esto nos afecta a muchos.
Porque esta situación no empieza ni acaba en jugadores y entrenadores. Son nutricionistas, fisioterapeutas, preparadores físicos, aficionados, periodistas, ciudades y sus pequeños negocios… en definitiva, personas y familias que dependen de este deporte económicamente.
Y si dejamos a un lado lo económico, ¿existen categorías en las ilusiones de los aficionados? ¿En la ambición deportiva e ilusión por competir? ¿No deberíamos tener todos las mismas oportunidades de cumplir sueños?
Nos debemos a nuestras aficiones, a sus ilusiones, a sus ganas de disfrutar y crecer con sus equipos. Por ellos, por nosotros mismos, por nuestras familias y, en definitiva, por todas las personas que hacen que este deporte siga en pie.
Manteniendo la lógica, la responsabilidad y las medidas que como ciudadanos debemos tener para sumar a esta transición, creo que TODOS deberíamos tener el derecho de poder trabajar.
Me gustaría pedir reflexión y solidaridad para hacer que este deporte sea mejor y se mantenga unido ante esta crisis, dejando a un lado los intereses particulares, y teniendo una visión global de todos, todos los que pertenecemos a esta profesión y a los que nos apasiona este deporte.
Fdo: José María Salmerón
