Los tres equipos de base del Club Ciclista Arandino, la Escuela Siro Vázquez, el equipo cadete Bici Aranda y los juveniles del Recambios Callejo, regresaron la pasada semana a sus entrenamientos conjuntos habituales después de tres largos meses en los que ni tan siquiera pudieron verse.
Dejando por ahora de lado la competición, el objetivo primordial de los técnicos del club ribereño no es otro que el de que sus pupilos retomen el contacto cara a cara para volver así poco a poco a la rutina y la actividad que viene siendo habitual en estos equipos.
Además, por el momento no todos los corredores han podido volver a encontrarse ya que los entrenamientos se están realizando evitando desplazamientos de los ciclistas que residen en Burgos hasta Aranda de Duero y viceversa.
Así, los técnicos del Club Ciclista Arandino ya han podido reencontrarse con los ciclistas cadetes y juveniles, tanto de Aranda como de Burgos, para celebrar con ellos entrenamientos sobre distancias de 50 kilómetros aproximadamente, en tanto que los jóvenes corredores de la Escuela Sino Vázquez han retomaba de momento la actividad con sus bicicletas de BTT.
Por el momento, el fin buscado por estos entrenamientos no es otro que el de conocer el estado de los corredores y establecer próximos objetivos. Empezar a hacer nuevamente kilómetros en equipo y adaptarse a esta nueva normalidad que también ha llegado al ciclismo, para lo que el Club Ciclista Arandino ha establecido un protocolo específico de seguridad y prevención.
