- Álex Barrera, Thad MacFadden, Goran Huskic y Xabi Rabaseda fueron las bajas en el cuadro burgalés, y Jordan Sakho y Jasiel Rivero estuvieron en el banquillo pero ni llegaron a saltar a la pista. Todos ellos aquejados por el COVID-19.
- Lo único positivo en el Hereda San Pablo Burgos fueron su entrega en la primera mitad, en la que llegó a dominar hasta por 13 puntos (19-6, minuto 6), y la participación en el partido de tres jugadores de su filial: Tote Alonso, Kareem Queeley y Oliver Bieshaar.
El Hereda San Pablo Burgos ha perdido este domingo ante el Urbas Fuenlabrada (78-99) en partido correspondiente a la Jornada 9 de la Liga Endesa 2020-21 tras verse obligado a jugar por la ACB a pesar de haber tenido durante las dos últimas semanas hasta seis casos positivos de COVID-19 en su plantilla, jugadores que en ningún caso tuvieron participación en el encuentro. Thad McFadden, Álex Barrera, Goran Huskic y Xabi Rabaseda están confinados en sus domicilio guardando la cuarentena, y Jordan Shako y Jasiel Rivero estuvieron en el banquillo pero, muy débiles físicamente, ni tan siquiera llegaron a gozar de minutos en pista.
Una situación esperpéntica de la que solo es responsable el ente organizador de la competición, la ACB, y que provocó que el conjunto burgalés tuviera que afrontar la contienda con solo seis jugadores profesionales (Renfroe, Cook, Kravic, Benite, Salvó y Horton) que habían realizado apenas dos entrenamientos grupales en quince días, y con tres canteranos del Nissan Grupo de Santiago de la Liga EBA, Kareem Queeley, Oliver Bieshaar y el burgalés Alberto ‘Tote’ Alonso.
Y con esas piezas tuvo que salir a lidiar al ruedo el Hereda San Pablo Burgos, y con ellas dio la cara en un gran primer tiempo (40-42 al descanso) y hasta que le duró la gasolina en la reanudación (59-61, minuto 27), pero a partir de ahí las fuerzas de los hombres de Joan Peñarroya se fueron diluyendo y el Urbas Fuenlabrada -que hizo su trabajo ajeno al atropello al equipo burgalés- les pasó por encima hasta hacerse con merecimiento con la victoria por 78-99.
Un mejor arranque, imposible
Comenzó el encuentro el Hereda San Pablo Burgos dispuesto a dejarse la piel en la cancha y darlo todo desde un inicio sin importarle que el desgaste luego pudiera pasarle factura. Y así, con una gran actuación en defensa y con Dejan Kravic dominando la zona, logró su primera ventaja, 7-2 en el minuto 2 tras un parcial de 7-0, ya que la primera canasta del choque fue del equipo madrileño.
Los locales se sentían seguros a pesar de llevar tanto tiempo sin jugar, y como si estuvieran alentados desde a gradas por 9.000 gargantas que se encontraban en sus casa, siguió bien atrás e inspirado en ataque, y con dos triples de Vitor Benite y Ken Horton, más 5 puntos seguidos de Alex Renfroe, logró ponerse con un esperanzador 19-6 (minuto 6) en el marcador que hacía que muchos se restregaran los ojos con lo que estaban viendo.
Ya entonces, Joan Peñarroya le dio sus primeros minutos a Kareem Queeley y el Hereda San Pablo se siguió mostrando seguro (22-12), momento en el que también hizo aparición en la pista el burgalés Tote Alonso para que con dos canteranos en pista el partido llegara al final de su primer cuarto con un marcador de 25-18 más que meritorio.
Reacción de Fuenlabrada a base de triples
El segundo cuarto, sin embargo, fue otra cosa. De salida dos triples seguidos de Alex Urtasun, que no había intervenido en el primer parcial, acercaron al Fuenlabrada hasta el 27-26 y definitivamente la ventaja burgalesa ya había sido reducida a la mínima expresión.
Los síntomas de cansancio empezaban a notarse en los hombres de Peñarroya, y además otra vez empezaron a estar gafados desde la línea de tiros libres (11/22 en todo el partido). Sin embargo, dos triples en el mismo minuto de Benite y Horton mantenían aún por delante al Hereda San Pablo (33-29), y otro más de Horton (14 puntos en el primer tiempo) permitía a los burgaleses recuperar la confianza (39-35, minuto 18).
Sin embargo, los dos últimos minutos del primer acto fueron letales y sendos triples de Urtasun -el tercero de su cuenta- y otro más de Trimble, amén de un mate final de Eyenga permitieron al Urbas Fuenlabrada irse al descanso dos puntos arriba (40-42).
Hasta que duró el aliento
Con el partido en el alero comenzó la segunda parte, y a pesar de que 4 puntos seguidos de Meindl, inédito en el primer tiempo (40-46), el Hereda San Pablo no se arrugó y siguió enganchado a la contienda gracias a dos hombres como Benite (10 puntos entonces) y Kravic (otros 10), que volvieron a poner por delante a su equipo (49-48).
Era un ‘hacer la goma’ continuo, pero el cuadro burgalés no quería dar su brazo a torcer, y a pesar de que Marc García y Mark Trimble empezaban a dar un recital en el tiro exterior (23 y 20 puntos anotaron respectivamente) el Hereda San Pablo supo reponerse de un 51-57 adverso para con dos triples de Salvó y Benite seguir en la pomada (59-61, minuto 27).
Y hasta ahí. Porque entonces, definitivamente, la gasolina local se acabó, el depósito se vació y el Urbas Fuenlabrada logró cerrar el tercer cuarto con un parcial de 3-14 que prácticamente empezaba a dejar claro hacia donde se iba a decantar el encuentro (62-75).
Diez minutos de más
De hecho el último cuarto ya fue un querer y no poder en el Hereda San Pablo, acribillado desde el exterior nuevamente por Marc García y Trimble y falto de fuerzas para poder seguir plantando cara a un rival que no tardó en alcanzar los 20 puntos de ventaja (70-90, minuto 34) y que ya tenía el triunfo en su mano.
Por si fuera poco, Dejan Kravic, con un golpe en una ceja y sangrando de forma abundante, tuvo que abandonar el partido, y lo más interesante en los 5 últimos minutos fue ver juntos en pista al burgalés Tote Alonso, a Oliver Bieshaar y a Kareem Queeley, éste último autor de 6 puntos y dos de ellos con un mate espectacular.
¿El resultado? 78-99. Pero en esta ocasión fue lo de menos.
FICHA TÉCNICA:
Hereda San Pablo Burgos: Dejan Kravic (17), Alex Renfroe (9), Omar Cook (6), Mikel Salvó (10) y Vitor Benite (13) -cinco inicial-; Ken Horton (17), Kareem Queeley (6), Tote Alonso (-), Jordan Sakho (-), Jasiel Rivero (-) y Oliver Bieshaar (-).
Urbas Fuenlabrada: Christian Eyenga (12), Meindl (11), Marc García (23), Mark Trimble (20) y S. Thompson (-) -cinco inicial-; Omegano (-), Oliver Stevic (10), Alex Urtasun (14), Chema González (-), O. Ehigiator (-), Z. Samar (4) y C. Kloof (-).
Árbitros: Alfonso Olivares, Alberto Sánchez y Carlos Peruga.
Parciales: 25-18, 40-42 (descanso); 62-75 y 78-99 (final).
Incidencias: Partido de la 9.ª Jornada de la Liga Endesa (ACB) disputado en el Coliseum Burgos a puerta cerrada.