Punto y aparte en la primera temporada del UBU San Pablo Burgos en División de Honor Plata. El bloque burgalés cerró la primera fase de la temporada 2020-21 con una trabajada victoria (24-27) en una cancha con público, tensión y con un BM Lalín que buscaba el último billete para la zona noble de la tabla. Los rojinegros se sobrepusieron a un inicio arrollador de los locales para ir cocinando a fuego lento un triunfo con el que ponen un broche de oro a su estreno en la segunda categoría nacional.
El choque comenzó con el inhabitual sonido de un pabellón con las gradas pobladas y con la presión atenazando al equipo local, con obligación de ganar para mantener activo el sueño de entrar en la zona alta de la clasificación. Los ingredientes eran propicios para que el arranque fuera favorable al cuadro local, tal y como se vivió, con un Lalín que pasó el rodillo en los primeros minutos y a los que la exclusión de Claudio en el minuto 1 ayudó a despegar en el primer parcial con un 4-1.
No esperó mucho Nacho González para parar el juego. En el 7:40 y un con marcador de 5-2 reunió a sus hombres en torno al banquillo para reordenar posiciones. La charla fue productiva, de modo que solo dos minutos después los burgaleses ya habían igualado la contienda. Las espadas estaban en alto y cada acción era de máxima intensidad. El bloque local defendía con dureza de modo que obligaba a los burgaleses a jugar la mayoría de los ataques en estático, algo poco frecuente para el UBU San Pablo.
Seguía comandando el BM Lalín el marcador, pero sin conseguir despegarse, y la ansiedad empezó a aparecer en las filas locales. Con 11-11 en el luminoso (min. 25), Pablo Cacheda solicitó tiempo muerto para no dar pie a más errores en las filas gallegas. El receso no cambió en exceso la dinámica del encuentro, salvo porque los cidianos se situaron por primera vez arriba en el marcador, aunque sin abrir brecha a causa, en parte, por el portero local, Villarroel, muy ‘enchufado’ toda la primera mitad. Así, con un 13-13 se llegó al descanso.
Todo por decidir en el segundo tiempo
Las hostilidades se acrecentaron nada más reanudarse el choque. Dos exclusiones seguidas, primero de Pinillos y después de Claudio, dejaron a los rojinegros momentáneamente con dos hombres menos, lo que dio alas a los gallegos, que se desmarcaron con dos tantos de ventaja rápidamente.
Sin haberse repuesto aún de la doble inferioridad, el pivote cubano recibió la tercera exclusión lo que supuso la tarjeta roja y un nuevo revés para el cuadro castellano. Sin embargo, los locales no supieron ‘romper’ el partido en ese momento y ya con igualdad de efectivos en cancha, el UBU San Pablo Burgos recobró la confianza y dio la vuelta al marcador para colocarse con un 17-19 en el 42.
La ansiedad hizo acto de presencia en el cuadro local y una exclusión de Álvarez se convirtió en roja por la airada protesta del jugador local. Las dos dianas de ventaja persistían en el tanteo gracias a la gran actuación de Villarroel, pero mediada la segunda mitad el ritmo creciente de los burgaleses empezó a imponerse para abrir distancias con un 19-23 que obligó a Cacheda a parar el partido.
No había dicho todo el equipo local y un arreón le acercó en el marcador a solo dos goles, por lo que Nacho González decidió que no quería dejar que esa tendencia local se prolongara, así que pidió un tiempo muerto (min. 53). El Lalín sumó un nuevo tanto, lo que dejaba abiertos y en nivel de máxima tensión los últimos instantes del duelo.
A falta de dos minutos, con tres tantos de ventaja visitante, Cacheda preparó jugada, Ibrahim la abortó inicialmente, pero los locales acabaron anotando. De igual modo, a falta de menos de un minuto, fue Nacho González el que buscó cerrar el choque con una jugada estratégica que tampoco salió como estaba planeada. No obstante, el tiempo se había consumido y un gol de Espinosa dio por concluida la contienda con el marcador de 24-27 que cierra la primera fase del UBU San Pablo con un sobresaliente.
FICHA TÉCNICA:
DISCILÍN BALONMÁN LALÍN 24: Villarroel (1), Gil (1), López (3), Batán (5), Porto (8), R. Pedreira (1), Dacosta (), -siete inicial- B. Fernández (1), R. Fernández (1), Durán, Losón (1), A. Pereira (), Toimil (), Franco, Álvarez (2).
UBU SAN PABLO BURGOS 27: Ibrahim, Pinillos (3), Claudio Ramos, Ernesto (),Dalmau (2), Juan Tamayo (3), Joshua da Silva (3), -siete inicial- Marcos Braga (2), Cantore (1), Espinosa (3), Raúl (3), Samuel (4), Javi Rodríguez (), Álvaro Torres (3), Mile, Juli ().
PARCIALES: 4-1 / 6-4 / 7-6 / 10-8 / 11-11 / 13-13 / descanso / 16-14 / 17-17 / 18-20 / 20-24 / 22-24 / 24-27
ÁRBITROS: Sergio Estelles García y Mauro Antonio Montero Suárez. Excluyeron a R. Fernández (min. 19:21), Losón (min. 39:38), Álvarez (min. 42), por parte del Discilín Balonmán Lalín, y a Claudio Ramos (min. 1:32, 32:18 y 36:13), Nacho González (Dalmau. min. 20), Pinillos (min. 31:30), del UBU San Pablo. Sacaron tarjeta azul al jugador local Roberto Álvarez, por protestar.
INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la decimoctava jornada del Grupo A de División de Honor Plata disputado en el Lalín Arena con presencia de 250 espectadores.
Nacho González: «Son dos puntos muy importantes en una cancha muy difícil»
Tras el encuentro, el entrenador del UBU San Pablo, Nacho González valoraba como «muy importantes estos dos puntos en una cancha muy difícil, ya que ellos se jugaban todas las opciones a un partido y con público, que se nota mucho. Además, hemos sabido reponernos de un inicio complejo, con una exclusión tempranera y un parcial para ellos favorable», explicaba el preparador.
«Luego hemos ido entrando en el partido y la defensa 5-1 nos ha ayudado mucho para coger un pequeño margen en el marcador y ahí hemos medio controlado el partido. Lo mejor es el aprendizaje que nos llevamos de lo que es jugar en esta categoría con público y frente a un equipo que se está jugando mucho. Sin duda ha sido un gran paso adelante en la madurez del equipo», concluí Nacho González.