Ya de regreso en Burgos después de haber puesto el punto y final a su temporada particular en pista cubierta y de haber sumado un nuevo éxito a su ya largo historial deportivo, el atleta burgalés Jesús Gómez (Nike Running) ha retornado sus habituales escenarios de entrenamiento, las Pistas Purificación Santamarta de San Amaro y el parque de El Parral, para disfrutar de su segunda medalla de bronce consecutiva en los 1.500 metros de un Europeo bajo techo.
No por ello va a tomarse un descanso -sí en cuanto a competiciones pero no va a dejar de entrenar- y además a finales de este mismo mes de marzo acudirá a una nueva concentración junto a sus compañeros del Grupo de Entrenamiento ‘Universidad de Burgos’, tras la que empezará a organizar su temporada al aire libre.
Bronce en Glasgow 2019 y bronce en Torun 2021. Dos éxitos internacionales en pista cubierta y junto a dos grandes del atletismo mundial como Jacob Ingebrigtsen y Marcin Lewandowski. ¿La confirmación como atleta de élite?
Bueno, digamos que otro gran paso en mi carrera tras lograr otra medalla en un Europeo y en una prueba de 1.500 de nivel mundial por la calidad de los atletas que tuve como rivales. Por eso me sabe muy bien y es el broche final a una temporada invernal muy corta, pero muy intensa y muy bonita. Así que estoy súper contento de poder aportar otro metal al atletismo burgalés.
¿Es la confirmación de que la concentración en Kenia, en el mes de diciembre, ha dado sus resultados?
Sí, sin duda, aunque sufrimos mucho allí porque entrenamos muy duro. Sin embargo, ya están viniendo los resultados a ese trabajo, y la confirmación de que lo que fuimos haciendo en cada momento era lo que había que hacer. El fruto, esta medalla de bronce que es mía y de mi entrenador al 50%, así que estoy también muy contento por él.
¡Siempre menciona a Benjamín Álvarez Furones tras cada uno de sus éxitos!
Es que los resultados no salen porque sí, el secreto es tener una persona a tu lado que te marque el trabajo que debes hacer, que te conozca bien, que te apoye, que te entienda cuando las cosas no te van todo lo bien que esperas, y ese es el caso de Benjamín, en el que confío plenamente. Todas las medallas que estamos logrando los atletas de mi grupo de entrenamiento, y las mías en particular, son gracias a él, cómo no.
Hablamos de la final de 1.500 metros de Torun. Logra el bronce que durante un par de horas se convirtió en plata, pero finalmente sube al podio como tercero. ¿Cree que se hizo justicia con la recalificación de Ingebrigtsen como ganador?
Más que pensar en que podía haber logrado la medalla de plata, yo pensé siempre en que iba a subir de nuevo al podio de un Europeo. De hecho hasta el sábado, un día después de la carrera, no supimos quiénes teníamos que subir al podio, ya que Ignacio Fontes, mi compañero en la selección española, fue bronce durante unas horas. Sin embargo, creo que los jueces acertaron recalificando a Ingebrigtsen, ya que se vio que no se benefició para nada de pisar fuera y lo que hizo luego es demostrar claramente que era el más fuerte.
¿Hubo luego tensión en el podio, tirantez entre Jacob Ingebrigtsen y Marcin Lewandowski?
No, para nada. Lewandowski le reconoció a Jacob que él había sido mejor, igual que lo sabíamos todos, pero que también tenían que ser las reglas igual para todos, ya que en otras pruebas sí hubo descalificaciones por infracciones parecidas.
España cerró el Campeonato de Europa con 5 medallas, 1 oro, dos platas y dos bronces. ¿Buen balance?
Yo creo que sí. Cuatro de los medallistas repetimos respecto al Europeo de Glasgow, Óscar Husillos, Ana Peleteiro, Jorge Ureña y yo, además del bronce de Mechaal. Pero muchos otros compañeros fueron finalistas, algunos siendo debutantes, logramos varios cuartos puestos y varios atletas consiguieron su mejor marca personal, así que es para estar contentos.
Y en su caso personal, acaba la temporada en pista cubierta logrando su tercer título nacional consecutivo, haciendo su mejor marca en 1.500, en el Meeting de Madrid (3.36.32); y consiguiendo su segundo bronce europeo. ¡Poco más se puede pedir, no!
Pues sí, poco más. Creo que me he superado un poco más, ya que he bajado mi marca, he repetido título de campeón de España y me he traído una medalla continental. No es la de oro ni la de plata, pero es un bronce que es súper importante para mí. Así que muy contento de que las cosas me hayan ido así de bien, y de que me sonriera la suerte en la rápida recuperación de la lesión que tuve y que me permitió llegar al Campeonato de España.
Por cierto, ¿qué secreto esconde Burgos para que salgan tantos atletas buenos en una prueba tan exigente como los 1.500 metros?, caso de Juan Carlos Higuero, Diego Ruiz, Javier Abad, Lidia Campo, Celia Antón o el júnior Manuel de Prado, que viene pisando fuerte.
Pues no lo sé, la verdad, pero la realidad es que en los últimos años estamos saliendo mucha gente buena en esta prueba. En mi caso, lo que sí que puedo decir es que hay mucho trabajo detrás, que no hay otro secreto al margen de tener condiciones para ser atleta, lógicamente. Sin trabajo es imposible llegar a cotas muy altas.
¿Y ahora, qué? ¿Descanso total o descanso activo?
Descansar como tal no lo voy a hacer. Estaré unos días saliendo a correr tranquilamente, con la cabeza despejada, haciendo alguna serie junto a otros compañeros del grupo de entrenamiento, todo más suave, y a finales de este mes de marzo acudiré a una nueva concentración para empezar ya a preparar la temporada de verano.
Todo ello pensando que esto va a mejor, que la llegada de las vacunas va a facilitar una mayor normalidad a partir de ahora, y que habrá Juegos Olímpicos en Tokio.
Pues esperemos que así sea, no contemplo otra situación. Las vacunas van a ser muy importantes y ojalá todo vuelva a su cauce cuanto antes y que haya la mayor gente inmunizada cuanto antes, lo que sin duda ayudará a la celebración de los Juegos de Tokio.