El Ayuntamiento de Burgos ha brindado este miércoles un merecido recibimiento a una representación del Burgos CF Promesas de la Tercera División, equipo que el pasado sábado conseguía el ascenso a la Segunda División RFEF, nueva categoría del fútbol español (sustituta de la actual Segunda B) que se estrenará la próxima temporada, tras imponerse en un frenético encuentro al Mirandés B por 2-1 y en la prórroga.
Su presidente, José Luis Fernández Manzanedo, acompañado de otros directivos como Pepe Medina y Juan Villaverde; por el entrenador del equipo, Carlos Aguilera; y por cuatro de los jugadores del equipo, los burgaleses Gabri Ortega, Andrés González y Sergio Esteban, además del portero guipuzcoano Gorka Giralt; acudían al Salón de Plenos del consistorio para recibir la felicitación por su éxito en nombre de toda la ciudad de Burgos.

Como anfitriones, el alcalde, Daniel de la Rosa; el concejal de Deportes, Leví Moreno; y junto a ellos otros miembros de la corporación municipal pertenecientes a todos los grupos políticos con representación en ella. Entre ellos, perfectamente ataviado con una camiseta naranja (los colores originales del CD Burgos Promesas 2000), Israel Hernando, de Podemos, gran seguidor del club de la Ciudad Deportiva de Castañares.
Manzanedo: «Estuvimos al borde de la desaparición como club»
Se aguardaban con interés las intervenciones previstas, sobre todo la del presidente del CD Burgos Promesas, y Pepe Manzanedo fue muy claro y conciso al referirse a la convulsa relación vivida esta temporada con el Burgos CF, pero aun así mostró su deseo «por el bien del fútbol burgalés» de que ambos clubes mantengan el convenio de filialidad y colaboración que firmaron al inicio del curso pasado para las 14 siguientes campañas.

«Tras conseguir este ascenso empieza ahora para nosotros un reto importante, el de consolidar el club en la Segunda División RFEF. Para ello necesitaremos de muchos más recursos que con el trabajo de todos encontraremos. Ahora mismo seguimos siendo filiales del Burgos CF y lo vamos a seguir siendo, pero siempre y cuando tras el cambio en el accionariado del club, los empresarios de Burgos que ahora tienen la mayoría de las acciones confíen en nosotros. Nosotros confiamos en ellos y esperamos trabajar juntos para hacer un proyecto interesante para la ciudad», aseguraba el presidente del Burgos Promesas.
Un guante tendido al Burgos CF tras reconocer que habían conseguido superar con éxito «un año muy duro, muy difícil, en el que estuvimos al borde de la desaparición como club y también del equipo de la Tercera División. Pero gracias al trabajo de la plantilla, de los entrenadores, de todos los colaboradores que tenemos en el club, remando todos en la misma dirección, hemos conseguido una recompensa enorme para un club muy modesto como el nuestro
Antes, Manzanedo había dado las gracias al Ayuntamiento de Burgos, «por ofrecernos esta recepción en nuestra casa, la de todos los burgaleses», y dirigiéndose al alcalde, Daniel de la Rosa, señaló que «sé que te ha hecho mucha ilusión nuestro ascenso y valoramos muy positivamente cómo estáis desde el Ayuntamiento ayudando de forma importante al fútbol base. Además, te pedimos una obra para habilitar en los exteriores de la Ciudad Deportiva un parking, y se hizo en tiempo récord, y te lo agradecemos especialmente. Nuestras instalaciones de Castañares nos llenan de orgullo y creo que son de las mejores de Castilla y León«.

Daniel de la Rosa: «Pido a la familia Caselli que dé todas las facilidades»
Recogía el testigo el alcalde de Burgos mostrando su gran alegría por el ascenso del Burgos CF Promesas. «Vuestro logro ha sido el más importante de un club de cantera del fútbol burgalés conseguido hasta la fecha. Un ascenso de un filial del Burgos CF a la actual Segunda B, y esto nunca había ocurrido. Sabemos además de las dificultades que habéis tenido este año, más que cualquier otro, y siempre habéis encontrado nuestro apoyo como Ayuntamiento que se vuelca en ayudar a los clubes de élite y fomentar también el trabajo desde la base».
Además, Daniel de la Rosa se descolgaba en elogios a la figura de Pepe Manzanedo, presidente del Burgos Promesas. «Eres el mejor exponente de lo que es la pasión con mayúsculas por el fútbol. De esos directivos a los que puedes encontrar en Castañares arreglando el césped, una valla, entrenando a sus chavales, hablando con los técnicos, reuniéndose con los padres, etc. Eso es el fútbol de verdad y el que representa Manzanedo«.

Finalmente, el alcalde de Burgos aseguraba el apoyo desde la corporación provincial al nuevo proyecto del club de Castañares y se volvía a ofrecer como intermediario para encauzar sus relaciones con el Burgos CF. «Vais a contar con el apoyo decidido de este Ayuntamiento siempre. Sé que la filialidad con el Burgos CF ha sido para vosotros en cierto modo un lastre, pero al mismo tiempo entiendo que es importante que los dos clubes sigáis de la mano, pero no a cualquier precio, eso está claro».
«Para ello vamos a mediar desde el Ayuntamiento para que las garantías de vuestro proyecto de unión se mantengan. Acompañaremos las conversaciones para que el final de las mismas sea positivo, y para ello tengo plena confianza en el grupo inversor burgalés liderado por Miguel Ángel Benavente. Tiene la responsabilidad compartida por todos sus miembros, de hacerlo, y estoy seguro de que así lo harán. Y para ello pido a la familia Caselli que dé todas las facilidades para que el Burgos CF tenga esa capacidad de gestión que ahora mismo necesita«, concluía Daniel de la Rosa.

Carlos Aguilera y Gabri Ortega, entrenador y capitán
Intervinieron también en la recepción municipal al Burgos CF Promesas su entrenador, Carlos Aguilera, y su capitán, Gabriel Ortega ‘Gabri’, ambos con contrato en vigor para la próxima temporada. «Estar aquí, en el Ayuntamiento, es indicativo de que algo bueno hemos hecho, y para nosotros es un orgullo haber sido invitados«, señalaba agradecido el entrenador burgalés.
«He vestido la camiseta del Promesas desde niño, y en él empecé a entrenar hasta llegar al primer equipo, y haber conseguido este ascenso me llena de gran felicidad. Además, tras haberlo hecho bajo unas circunstancias duras, pero se ha demostrado que cuando un colectivo está fuerte, unido, y apuesta por el grupo por encima de las individualidades, se pueden conseguir grandes cosas. Y ahora lo que nos viene por delante es muy ilusionante», concluía Carlos Aguilera.

Finalmente, el capitán burgalés, Gabri, daba «gracias al Ayuntamiento por ofrecernos esta recepción y al club por su apoyo recibido todo el año y que los jugadores hemos notado. Ha sido un año duro en el que hemos tenido que ser esponjas y adaptarnos a todos los cambios que se iban produciendo, y creo que en eso hemos sacado matrícula de honor. A partir de ahora, creo que este ascenso ayuda un poco más a crecer el deporte burgalés hacia categorías de élite«.
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