- Grego Sierra propinaba un codazo a un rival en el propio área del Leganés, al que se había sumado para intentar rematar una falta lateral, y el VAR convenció al colegiado de que debía ser expulsado.
- Álex Alegría, Riki y el propio Grego Sierra se estrenaron como titulares, y en la segunda parte también dispusieron de sus primeros minutos como blanquinegros José Matos y Miguel Rubio.
El Burgos Club de Fútbol ha sumado este lunes un más que meritorio empate en su visita al CD Leganés (0-0) tras saber sufrir en un partido que se le puso muy pronto cuesta arriba tras la justa expulsión de Grego Sierra en el minuto 18 por soltar un codazo sobre un jugador local. A partir de ahí el objetivo de los blanquinegros se convirtió en saber defenderse lo mejor posible y, si podía ser, intentar sorprender a su rival en un contragolpe.
Consiguió lo primero, no así lo segundo, pero al menos acabó sacando un valioso punto dejando además su portería a cero. De esta forma el Burgos estrena su casillero de anotación en la temporada de su regreso a la Segunda División, y con esta buena sensación preparará ahora una semana más corta de lo normal hasta recibir este próximo domingo en El Plantío a la SD Éibar (22.00 horas).
Sorprendió de salida Julián Calero en el once inicial del Burgos CF con hasta tres cambios respecto al equipo que fue titular ante el Sporting de Gijón. Así, se caían de él Míchel Zabaco, Undabarrena -aquejado de gastroenteritis durante la semana- y Raúl Navarro, y en su lugar entraban Grego Sierra en el eje de la zaga, Riki en la medular y Álex Alegría en la punta de ataque como jugador más adelantado.
Más allá de eso, el entrenador madrileño mantenía el sistema 4-1-4-1 con Elgezabal de pivote por delante de la defensa, Andy Rodríguez y Riki como mediocentros, Juanma y Saúl Berjón en las bandas como extremos y Álex Alegría como principal referencia ofensiva.
Con ese planteamiento, los primeros minutos fueron un traspaso de intenciones entre los dos equipos, intentando de entrada el Leganés imponer su condición de local queriéndose hacer con el control del balón. En base a ello, pero encontrándose de entrada a un Burgos serio en defensa, el equipo madrileño disponía en el minuto 10 de un disparo de Juan Muñoz desde la frontal que se le iba muy desviado.
Una ocasión que solo un minuto después llegaba acompañada de una indecisión de su compañero Omeruo en defensa de la que se aprovechaba Riki para irse en diagonal hacia el área y, a pesar de contar con el ofrecimiento de Alegría, jugarse un remate cruzado que se le escapaba por encima del larguero.
Los de Calero -de nuevo vestidos completamente de negro, al igual que en Gijón- empezaban a encontrarse cada vez más cómodos, pero en el minuto 18, en la antesala de una falta sobre el área local que se disponía a sacar Saúl Berjón, a Grego Sierra se le escapaba un claro codazo sobre un rival que Sánchez López, colegiado del partido, tras visionar la jugada por el VAR, castigó con una tarjeta roja que se antojaba hasta justa.
Así lo entendía también el propio entrenador del Burgos, que recibía a Grego Sierra en el banquillo claramente malhumorado, y además en la primera jugada de ataque del Leganés era José Arnaiz el que se iba de todos los jugadores que le salían a su paso para plantarse en el área pequeña y, con todo a favor, encontrarse una gran parada de Alfonso Herrero, que evitaba así el tanto pepinero.
No había tenido tiempo aún el cuadro burgalés de recomponer su equipo y sin tiempo que perder lo hizo a continuación Julián Calero dando entrada a Zabaco en lugar de Riki, cuyo estreno de la titularidad le duraba apenas 21 minutos. De esta forma el Burgos pasaba a situarse con un sistema 4-4-1, incrustándose Zabaco en el centro de la defensa junto a Aitor Córdoba y pasando Elgezabal a la medular junto a Andy Rodríguez.
Ajustado el equipo, fueron incluso los burgaleses los que gozaron de la siguiente oportunidad de gol que arrojó el encuentro, un testarazo de Elgezabal que atrapaba Riesgo estirándose a su derecha, y de nuevo bien asentados sobre el terreno de juego alcanzaron el minuto 30 sin pasar por apenas apuros.
Aun así, el Leganés empezó poco a poco a acrecentar su dominio e intensidad de su ataque con centros continuos al área, y en el minuto 39 un testarazo de José Arnaiz tras un centro de Bustinza desde la derecha lo volvía a repeler Alfonso Herrero, que empezaba convertirse en el mejor jugador del Burgos CF.
Afortunadamente, el dominio de los de Asier Garitano se quedó en eso, en mayor presencia sobre el campo rival, pero el Burgos conseguía finalmente alcanzar el término de los primeros 45 minutos (49 con el descuento) manteniendo su portería a cero y con la confianza de haber superado la dura prueba de quedarse tan pronto con un hombre menos.
Doble cambio en el Burgos CF
Tras el paso por los vestuarios, Julián Calero decidió refrescar su equipo y se quedaron en la caseta Juanma y Álex Alegría para dejar paso en su lugar a dos hombres de refresco como Raúl Navarro y Guillermo, que se situaban en el carril derecho y en el puesto solitario de 9.
Sin casi tiempo para que ambos se asentaran, lo probaba ya desde lejos el jugador local Javi Hernández para encontrarse de nuevo una bonita parada de Alfonso Herrero, que seguía a lo suyo, muy seguro bajo los palos del Burgos CF. Le replicó en el área del Leganés Andy Rodríguez con un disparo desde la media luna que atrapaba Riesgo sin problemas.
Con esas dos ocasiones y un conjunto burgalés cada vez mejor asentado, iban pasando los minutos y los de Butarque empezaban a impacientarse, intentándolo demasiadas veces con remates lejanos, como otro de José Arnaiz en el minuto 63 que se le escapaba junto a la escuadra izquierda.
No lo veía nada claro Asier Garitano, que poco después quemaba otras dos de sus naves dando entrada a Fede Vico -ultimo fichaje del Leganés- y Jonathan Silva por Juan Muñoz y Quintillá, visiblemente cansados; en tanto que en el Burgos era José Matos el que relevaba a Saúl Berjón, aquejado de una aparente sobrecarga muscular.
Matos se situaba como segundo lateral zurdo por delante de Fran García y como ‘gato panza arriba’ aguantaban los burgaleses ante un Leganés que empezó a someterles tras entrar en sus filas otros dos hombres de refresco como Diego y Naim. Aun así, el Burgos seguía serio en defensa y así alcanzaba el minuto 85, aguantando el 0-0 como buenamente podía.
Además, para afianzar aún más su zaga, el defensa Miguel Rubio, último en llegar al equipo blanquinegro, relevaba a Andy Rodríguez y se situaba como tercer central junto a Zabaco y Aitor Córdoba para frenar mejor a un Leganés que situaba ya dentro del área hasta a cuatro y cinco jugadores en cada ataque.
La apuesta le salió bien a Julián Calero y el partido se moría en el minuto 95 con un Burgos que se felicitaba gratamente por el empate obtenido y un Leganés que maldecía su impaciencia al no saber cómo atacar la sólida defensa de su rival. Al menos los dos clubes sumaron así su primer punto de la temporada 2021-22.
FICHA TÉCNICA:
CD Leganés: Riesgo; Bustinza, Omeruo, Javi Hernández; Sergi Palencia (Sabin Merino, minuto 46), Gaku (Diego, minuto 80), Luis Perea, Quintillá (Jonathan Silva, minuto 65); José Arnaiz (Naim, minuto 80), Juan Muñoz (Fede Vico, minuto 65) y Yoel Bárcenas.
Burgos Club de Fútbol SAD: Alfonso Herrero; Álvaro Rodríguez, Aitor Córdoba, Grego Sierra, Fran García; Elgezabal; Juanma (Raúl Navarro, minuto 46), Riki (Zabaco, minuto 21), Andy Rodríguez (Miguel Rubio, minuto 87), Saúl Berjón (José Matos, minuto 80); y Álex Alegría (Guillermo, minuto 46).
Goles: No hubo.
Árbitro: Sánchez López (Colegio Murciano). Expulsó a Grego Sierra en el minuto 18 tras propinar un codazo a un rival en el propio área del Leganés.
Incidencias: Partido de la 2.ª Jornada de la Segunda División Liga SmartBank disputado en el Estadio Butarque de Leganés ante unos 4.000 espectadores.
