El UBU San Pablo Burgos saboreó este viernes su primera victoria de la temporada (34-35) tras vencer a domicilio al Balonmano Alcobendas en un duelo en el que los jugadores dirigidos por Nacho González se mostraron en muchos minutos como un bloque consolidado, aunque de nuevo su falta de regularidad volvió a ser el debe de los burgaleses.
El inicio del encuentro en la pista del Pabellón de los Sueños de Alcobendas fue realmente intenso, con dos equipos imprimiendo alta velocidad a los primeros instantes del partido. Los burgaleses tomaron pronto la batuta del juego, con un Dalmau Huix muy activo en ataque, a lo que acompañaba una defensa férrea que causaba muchos problemas a la ofensiva madrileña. Para aumentar más las prestaciones de los rojinegros, Ibrahim Moral echó el cerrojo en los primeros parciales para permitir una primera brecha visitante de tres tantos (min. 10. 4-7).
El UBU San Pablo se sentía cómodo sobre la pista y las múltiples rotaciones no mermaban la solidez rojinegra en todas las facetas del juego. Roberto Pérez percutía por el flanco derecho rompiendo las líneas defensivas locales y el partido parecía plácido. Sin embargo, pasado el ecuador del primer tiempo, el exceso de confianza animó al Alcobendas, que vio la oportunidad de inquietar la estabilidad de su rival y se situó a un gol de distancia (12-13).
El equilibrio llegó justo cuando el luminoso marcaba el minuto 25 de juego (14-14) y solo un minuto después se completaba la remontada del equipo madrileño. En el último parcial recordó al bloque burgalés que en la División de Honor Plata no hay caminos de rosas y llegó a colocarse incluso con tres goles arriba, de modo que los de Nacho González se vieron en muchos apuros para bloquear el avance de su oponente y lograr llegar al descanso con un 19-17.
Igualdad absoluta tras la reanudación
El UBU San Pablo volvió a la pista con la directa metida y un parcial de 0-3 reabrió la contienda (19-20). Pero poco duró la alegría burgalesa ya que la réplica local fue de un 5-0 que colocó la mayor ventaja para el Alcobendas en todo el partido (min. 38. 24-20). Pero cuando peor lo pasaban los rojinegros, dos exclusiones consecutivas en el Alcobendas dieron aire al cuadro burgalés para permitir una reacción que llevó a los burgaleses a igualar la contienda en el minuto 42 (24-24).
El choque entró así en una fase de ida y vuelta, con Ignacio Suárez como principal baza anotadora en en el UBU San Pablo, no en vano el bilbaíno terminó el partido con 13 dianas. En ese punto la manija la retomó Burgos y la ventaja visitante regresó al marcador (min. 48. 27-30). El bloque volvió a funcionar, también en defensa, y además Mile Mijuskovic empezó a parar, algo que terminó de llevar a la desesperación a los hombres de Samuel Trives, técnico local.
El encuentro parecía de nuevo encarrilado para los burgaleses, pero la sombra de la relajación planeaba otra vez sobre el conjunto rojinegro. El Alcobendas colocó una defensa individual para mermar las embestidas cidianas, especialmente la de Suárez, aprovechando que los de Nacho González se encontraban en inferioridad.
Alcobendas jugaba sus cartas y la partida se volvía más táctica que nunca. El cuadro madrileño despertaba y con 34-35 en el marcador se veía con un penalti a tiempo cumplido para igualar el duelo, pero Mijuskovic detuvo el lanzamiento y de esta forma permitió que llegara la primera victoria de la pretemporada para el UBU San Pablo.
PARCIALES: 2-3 / 4-7 / 8-10 / 10-12 / 14-14 / 19-17 / descanso / 21-20 / 24-22 / 27-25 / 27-30 / 30-34 / 34-35
