El Burgos Club de Fútbol SAD ha informado este martes que tras las pruebas PCR realizadas ayer lunes a todos los componentes del primer equipo, además de los empleados que trabajan en el club, se han detectado 9 casos positivos por COVID-19 en la primera plantilla y cuatro más entre los trabajadores de la entidad blanquinegra.
Según reza el comunicado oficial del Burgos CF SAD, «han sido detectados cuatro casos positivos de COVID-19 entre los miembros de la primera plantilla del Burgos Club de Fútbol, dos en el cuerpo técnico, entre los que se encuentra nuestro entrenador Julián Calero, tres en el staff y cuatro entre el personal del club. Los afectados se encuentran bien, siendo todos ellos asintomáticos o presentando sintomatología leve».
Entre los cuatro futbolistas se encuentran el burgalés Michel Zabaco, Álvaro Rodríguez y Ernesto Gómez, que a través de las redes sociales lo han confirmado. Todos ellos, en sus comunicados, aseguran estar bien de salud pero verse obligados a cumplir con el aislamiento domiciliario preceptivo para estos casos
Tras conocer los resultados de los test, y tal y como marca la normativa sanitaria de la Junta de Castilla y León, «todos ellos se encuentran en cuarentena domiciliaria», prosigue el comunicado, que concluye señalando que «siguiendo el protocolo sanitario de LaLiga, en el que se incluían estos test PCR, se ha iniciado este martes una rutina que contempla test de antígenos diarios a toda la estructura deportiva y todo aquel personal que desarrolle sus funciones en la dinámica diaria del equipo».
Siendo esta la situación en el Burgos CF, en principio se mantiene la señalización de su encuentro de este viernes ante el Amorebieta (16.00 horas), aunque el riesgo de un posible aplazamiento está ahí en caso de que en las próximas horas se detectaran nuevos positivos. Mientras el Burgos CF y el Amorebieta puedan presentar al menos 13 jugadores y 5 de ellos pertenezcan a la primera plantilla, el partido seguirá su curso.
