«No quiero echar más fuego al asunto, como se está haciendo desde Lugo. No vengo al Hereda San Pablo Burgos por dinero, sino por el proyecto ambicioso que me puso sobre la mesa y que no podía rechazar, solo por eso. Muchos que hablan de ética tendrían que preguntarse el significado de la palabra ética, y vengo a Burgos sin cometer ninguna ilegalidad, porque es un paso adelante en mi carrera como entrenador y porque un club como este ha decidido apostar fuerte por mí».
Con estas palabras, unas de las primeras en pronunciar en su presentación ante los medios de comunicación, Paco Olmos, nuevo entrenador del Hereda San Pablo Burgos por lo que resta de temporada 2021-22 y dos temporadas más, decidía darle carpetazo a su salida del Río Breogán de Lugo hecha oficial el pasado lunes, y que tantos ríos de tinta e incluso amenazas a uno de sus hijos desveladas por su representante, ha traído consigo tras su fichaje por el club burgalés.

«No esperaba esta reacción desde Lugo, pero ha sido algo que yo no podía controlar. Han sido días muy complejos y duros, lo mismo que no fue fácil para mí tomar la decisión, pero ahora, por favor, solo quiero hablar de presente y futuro, y por tanto de la etapa que se me abre en Burgos. Solo quiero pensar en baloncesto y en trabajar desde ahora duro por el Hereda San Pablo y el gran reto que se me presenta», zanjaba así la polémica el entrenador valenciano.

Olmos: «Quiero limpiar las cabezas de los jugadores y quitarles la presión»
Polémicas al margen, Paco Olmos agradecía al Hereda San Pablo la confianza en él depositada. «Estoy muy contento con el paso adelante que doy, lo mismo que hice en verano al firmar por el Breogán, recién ascendido de LEB Oro, a costa de que me dijeran que si estaba loco. La dimensión del proyecto que Burgos me presentó me convenció y ahora solo quiero trabajar desde ya para sacar al equipo de la situación delicada en la que está en la Liga Endesa y pensar en el partido importante que tenemos el martes en Estambul ante el Darussafaka».
Este jueves realizará su primer entrenamiento al frente de su nuevo equipo (lo hará con 9 jugadores disponibles, ya que cuatro siguen confinados tras dar positivo en el último test PCR sometido a la plantilla), y su primera misión es clara. «Lo primero va a ser llevar a cabo una labor psicológica y de liderazgo, limpiar las cabezas de los jugadores y buscar soluciones para hacer un baloncesto colectivo, de equipo, que nos permita ganar partidos, empezando por el martes en la Champions League. Nos viene un calendario muy agresivo por delante y no hay tiempo que perder».
En cuanto a la forma de juego que perseguirá implantar en el equipo, Paco Olmos señala que pasará sobre todo por «tener fortaleza defensiva. El baloncesto no es solo cuestión de meter y meter canastas, requiere una energía colectiva mayor y eso pasa por una buena defensa y luego un juego dinámico, sabiendo manejar los ritmos para saber qué necesita el partido en cada momento».
Paco Olmos viene de momento sin ningún ayudante
Paco Olmos llega en principio solo al conjunto burgalés y ya ha mantenido las primeras reuniones con el cuerpo técnico del equipo que va a tener a sus órdenes, entre ellos los dos entrenadores ayudantes, Fran Hernández y Félix Alonso, pero Albano Martínez, director deportivo y gerente del Hereda San Pablo, no descartaba la posibilidad de que puede llegar con él algún hombre de su confianza. «Es algo que se está valorando ahora mismo, pero de momento no hemos tomando una decisión firme al respecto».

Félix Sancho: «Que deje un club en puestos de Copa del Rey y apuesto por otro en zona de descenso, lo dice todo de Paco Olmos»
Félix Sancho, presidente del club burgalés, deseaba aclarar el por qué de la apuesta fuerte por el nuevo entrenador. «El hecho de que un técnico que estaba al frente del equipo revelación de la temporada, casi clasificado para la Copa del Rey, acepte salir de él y venir a otro club que ahora mismo está en puestos de descenso, dice mucho y bien de él y para mí es suficiente para tener plena confianza en su trabajo. Eso lo dice todo en su beneficio».
«Dije que haríamos lo imposible para sacar al equipo de la situación tan delicada en la que está, y por eso han llegado los dos últimos fichajes, el de Landry Nnoko y el que hemos anunciado hoy mismo de Jarell Eddie, y por eso hemos apostado ahora fuerte por Paco Olmos. Está aquí para ayudarnos y es una apuesta de futuro también. Quiere seguir creciendo con nosotros, le ha gustado el proyecto y por eso ha venido, no por todo lo que se está diciendo desde el entorno del Breogán«, señalaba Félix Sancho.

Por último, el presidente del Hereda San Pablo reconocía que a nivel económico va a ser una temporada muy complicada para el equipo. «Primero por los efectos propios de la pandemia respecto a la reducción de aforo, y sobre todo por los fichajes de nuevos jugadores, de tres entrenadores y teniendo que pagar cláusulas de salida de varios de ellos. Vamos a tener una desviación gorda y va a ser un año duro en lo económico, pero eso se arregla ganando otra vez la Champions», concluía en tono humorístico y esperanzador Félix Sancho.