- El conjunto burgalés llegó a ir perdiendo hasta por 14 puntos en el tercer cuarto (44-58) pero supo reaccionar en el último acto e incluso ponerse en balde por delante (66-64) para recibir a continuación un duro parcial final de 2-16.
- Dejan Kravic (10 puntos y 17 de valoración) y Dani Díez (13 puntos uy +15) fueron los mejores de un Hereda San Pablo que volvía a cometer muchas pérdidas (16) y volvió a ser castigado por Caupain (19 puntos) y Ozdemiroglu (14) principalmente.
El Hereda San Pablo Burgos no podrá reeditar este año sus dos títulos consecutivos de la Basketball Champions League tras caer derrotado este jueves en el Coliseum por el Darussafaka turco (68-80) en el tercer y definitivo partido de los Play-In que debían haberle dado el pasaporte a la segunda fase de grupos de la competición. El equipo burgalés, en un partido a tirones en el que estuvo cerca de obrar el milagro, finalmente no pudo con un rival que hizo mayores méritos para ganar y seguir su camino en la BCL 2021-22.
Apostó Paco Olmos de salida por un quinteto con la novedad principal de Kristian Kullamae en la dirección de juego y con Dani Díez en el poste bajo para formar el juego interior junto al camerunés Landry Nnoko. Con ellos tres, Vítor Benite y Xavi Rabaseda completaban el cinco burgalés, que de entrada marraba su primer ataque con un triple que se le quedaba corto al escolta brasileño.
Por contra, en el aro local no fallaba Troy Caupain desde más allá de 6.75 y era Landry Nnoko, al igual que dos días atrás en Estambul, el que abría la anotación del Hereda San Pablo con una fácil bandeja. El camerunés acertaba también en el siguiente ataque burgalés haciéndose fuerte en la zona (4-5, minuto 3), pero el problema empezaban a ser ya las faltas tempranas de los locales, cuatro al minuto 5 de encuentro.
Dos tiros libres de Rabaseda y una buena acción personal de Kullamae ponían el 8-8 en el electrónico, momento en el que Alex Renfroe daba relevo al base estonio, que se llevaba el aplauso del público por su papel más que aceptable en el inicio del choque. Además, Nnoko volvía a hacerse fuerte en la zona para adelantar por vez primera a los suyos (10-8) y ya eran 6 los puntos de su casillero.
Reaccionaba bien, sin embargo, el Darussafaka de la mano de su base, Caupain, pero un triple, el primero del Hereda San Pablo a cargo de Marc García, mantenía la iniciativa burgalesa (16-12, minuto 8). Los de Paco Olmos habían comenzado más o menos bien el encuentro, serios en defensa y concretos en ataque, haciéndolo fácil, y con empate (16-16) tras una nueva anotación de Caupain (8 puntos) llegaba a su conclusión el primer cuarto.
Un parcial de 3-19 lanza al Darussafaka pero reacciona el San Pablo
El inicio del segundo acto traía consigo de entrada el fallo de tres triples seguidos en el Hereda San Pablo (1/9 ya en ese momento) y por contra el triple acierto del Darussafaka en sus tres primeros ataques para establecer el 16-22 (parcial de 0-10) que obligaba al conjunto burgalés a parar el juego. Tras la pausa, ahora sí, Dani Díez acertaba con un tiro lejano (19-22), pero una pérdida de Renfroe (la sexta de equipo) empezaba ya a preocupar en el seno local.
Los turcos, además, sí acertaban con sus triples, el siguiente anotado por Sinan Guler, y unido a cinco tiros libres consecutivos establecían su mayor ventaja (19-31, parcial de 3-19) ante lo que empezaba a ser la desesperación del cuadro azulón. Además, ya estaban de nuevo en bonus de faltas para alegría de su rival, que veía ya en el minuto 15 la posibilidad de empezar a cerrar la eliminatoria.
Pero fue entonces cuando empezó a despertar el Hereda San Pablo con un triple de Kullamae, dos libres de Benite y un robo posterior de este que culminaba Kravic con un mate, y el parcial de 7-0 (26-31) levantaba a los aficionados de sus asientos y de paso el estado anímico de su equipo.
Además, Kullamae empezó a encontrar combinación con Kravic, autor de dos canastas seguidas con otro mate incluido (8 puntos en su cuenta), y el base estonio aportaba igualmente su segundo triple para mantener a los de Paco Olmos cerca del Darussafaka (33-37, minuto 19). En el momento más complicado había llegado la reacción burgalesa, pero un triple de Isaiah Pineiro sobre la bocina hacía daño a los locales para fijar el 34-40 con el que se llegaba al descanso.
Los de Paco Olmos se agarran al marcador como pueden
La reanudación del choque comenzaba por parte del Hereda San Pablo con un triple de Rabaseda y otra buena conexión Kullamae-Kravic que permitía al serbio irse ya hasta los 10 puntos. Además, hasta se aficionaba a asistir en su siguiente acción en la zona sobre Dani Díez, abierto en una esquina, y el triple del madrileño acercaba más que nunca a los burgaleses (42-44).
Pero el Darussafaka no aflojaba tampoco y tras encontrar por fin a Ozdemiroglu, desaparecido en el primer tiempo, volvía a subir una marcha más para volver a ensanchar su ventaja (42-49, minuto 24) y ampliarla a continuación con cuatro puntos más tras otras dos pérdidas en ataque (13 en ese punto) de los de Paco Olmos, que con 42-53 tenía que volver a parar el encuentro.
Pero la reacción del Hereda San Pablo tardaría en llegar y otro triple de Ozdemiroglu ponía el 44-58 que empezaba a pesar ya como una losa. Aun así no bajaban los brazos los propietarios del Coliseum y con un triple de Dani Díez y un mate tras robo de Rabaseda volvían a querer acercarse (49-58, minuto 28). Marc García, con un tiro a 3 metros, aportaba también lo suyo, pero ahí llegaba entonces el triple visitante, este obra de Caupain, que afortunadamente sobre la bocina de este tercer parcial neutralizaba Dani Díez para alcanzar los 13 puntos y poner el 54-61.
Esta vez no hubo milagro en el Coliseum
Quedaban diez minutos por delante para intentar creer en los milagros, pero los dos primeros solo servían para que al menos el Darussafaka no ampliara su ventaja (58-64, minuto 32). El Hereda San Pablo subía un poco más la intensidad de su defensa y acertaba a cerrar su rebote (25-20 lo ganaba al final de tercer cuarto), y tras una recuperación Alex Renfroe era objeto de una falta antideportiva.
Anotaba los dos tiros libres el americano y además el ataque subsiguiente lo culminaba Salash con una acción de 2+1 que, ahora sí, metía de lleno al equipo burgalés en el encuentro (63-64 tras un parcial de 19-6). Los nervios empezaron a atenazar entonces al equipo turco a la par que la presión ambiental fue creciendo, y el siguiente triple, este obra de Benite, lo metía con él el público para adelantar por vez primera al Hereda San Pablo (66-64).
Pero el Darussafaka tenía que reaccionar y lo hacía por medio de Caupain con un triple (17 puntos) y una acción en la zona de Dogan (66-69), y volvía a retomar el mando en el marcador (minuto 36). Además, dos tiros libres fallados, uno por Benite y otro por Marc García, impedían al cuadro local acercarse algo más del 68-71, pero todo el pescado estaba por vender a solo tres minutos para la resolución.
Sin embargo, el siguiente en golpear sería de nuevo el cuadro otomano, esta vez con un 2+1 de Piñeiro (68-74) y en el siguiente ataque Kravic cometía una falta que el Darussafaka castigaba con otra canasta (68-76). Ahora sí, el partido se moría ya para el Hereda San Pablo, que solo podía asistir a la sentencia por parte de su rival (68-78, minuto 39) antes de que Paco Olmos pidiera un tiempo muerto que ya poco podía solucionar.
Desde que se puso con ventaja, el parcial recibido era de 2-14 y los dos ataques siguientes eran fallados por Vítor Benite, taponado en el segundo, para que el choque concluyera con un mate final del visitante Olaseni que cerraba el choque. Una acción, ante la pasividad de la defensa burgalesa, que sacó de sus casillas especialmente a Dani Díez, que lo pagaba empujando a un rival para originar un amago de gresca que afortunadamente se quedaba ahí.
El campeón de la Basketball Champions League de los dos últimos años se despedía así de la competición a las primeras de cambio, pero lo hacía jaleado por su afición a pesar de todo y a los gritos de «Burgos, Burgos» que llevaron a emocionar a sus jugadores en su retirada a los vestuarios. Ahora -no hay mal que por bien no venga- podrán centrarse en la Liga Endesa y su cometido principal a partir de ahora, asegurar la permanencia.
FICHA TÉCNICA:
Hereda San Pablo Burgos: Kristian Kullamae (8), Vitor Benite (7), Xavi Rabaseda (7), Dani Díez (13) y Landry Nnoko (8) -equipo inicial-; Max Salash (3), Marc García (10), Hayden Dalton (-), Dejan Kravic (10), Alex Renfroe (2), Kareem Queeley (-) y Álvaro Martínez (-).
Darussafaka: Gabriel Olaseni (14), Troy Caupain (19), Isaiah Piñeiro (10), Dogus Ozdemiroglu (14) y Nathan Bothe (13) -cinco inicial-; Eray Akyuz (-), Wayne McCoullough (2), Troy Selim (-), Can Maxim (-), Sinan Guler (3), Ragip Atar (5) y Gorkem Dogan (-).
Árbitros: Yohan Rosso (Francia), Saverio Lanzarini (Italia) y Geert Jakobs (Bélgica).
Parciales: 16-16, 18-24 (34-40) -descanso-; 20-21 (54-61) y 14-19 (68-80).
Incidencias: Tercer partido de desempate de los Play-In de la Basketball Champions League disputado en el Coliseum Burgos ante unos 4.500 espectadores.
