- Brillante actuación personal de dos jugadores como Jarell Eddie, máximo anotador del Hereda San Pablo con 17 puntos -todos en el primer tiempo- y Landry Nnoko, autor de 13 puntos, 10 rebotes y jugador más valorado del equipo (+21).
- Kristian Kullamae fue el descarte de Paco Olmos, Marc García no jugó por precaución y destacó el debut de Tarik Phillip, que cerró el partido con 13 puntos, 3 rebotes y 2 asistencias.
El Hereda San Pablo Burgos se ha impuesto este viernes al Zamalek en las semifinales de la FIBA Copa Intercontinental 2022 por 61-78, triunfo con el que se ha ganado su billete para disputar este próximo domingo la final de una competición de la que es su vigente campeón. El equipo burgalés realizó un partido muy serio ante su rival, que asumía la responsabilidad de ser el anfitrión en su pista de El Cairo, y fue durante todo el partido por delante en el marcador para acabar rompiendo por fin esa larga y negativa racha sin ganar un partido.
Su rival en la final del domingo (19.00 horas, Teledeporte) será el conjunto brasileño del Flamengo, equipo que en la primera semifinal derrotaba con una gran suficiencia al Lakeland Magic de Orlando, equipo estadounidense y último ganador de la Liga de Desarrollo de la NBA, por un claro marcador de 94-71 (51-35 ya al descanso).

Comenzó el partido el Hereda San Pablo Burgos anunciando momentos antes su descarte para el choque, el del estonio Kristian Kullamae, y con un cinco inicial con presencia de Tarik Phillip de inicio para asumir labores de escolta y acompañar a Alex Renfroe en la dirección del juego. Junto a ellos Xavi Rabaseda en el puesto de alero y Landry Nnoko y Jarell Eddie asumiendo la responsabilidad en el juego interior.
Nnoko sería desde el arranque del choque la referencia a buscar en ataque, siendo para él 6 de los puntos de su equipo cuando el marcador señalaba una ventaja mínima del cuadro burgalés por 10-11 en el minuto 5 de encuentro. Además, a él se le unía felizmente para el Hereda San Pablo su última incorporación, Tarik Phillip, muy acertado en el tiro exterior para alcanzar también los 6 puntos en su casillero y poner el 10-14 en el electrónico.
De hecho seguiría inspirado en esta faceta el último fichaje del cuadro azulón, que volvía a ver aro, y a él se añadía igualmente Jarell Eddie con un triple desde la esquina que significaba el 12-19 y llevaba al entrenador del Zamalek a pedir su primer tiempo muerto. Había empezado muy bien el Hereda San Pablo, que empezaba además a refrescar su cinco inicial.
Para ello entraban Vítor Benite y Julian Gamble, que ponía el 16-23 tras anotar en sus dos primeras acciones dentro de la zona, lo que sin duda continuaba siendo muy bueno para acrecentar la confianza burgalesa, llegando así el final del primer cuarto con esa importante renta de siete puntos para los de Paco Olmos.
Cuatro triples de Jarell Eddie para ayudar al despegue de su equipo
La presión ambiental de un Hassan Moustafá Sports Hall lleno de seguidores egipcios no estaba condicionando para nada el juego del Hereda San Pablo, que iniciaba además el segundo acto encontrando otros dos triples consecutivos de Jarell Eddie que disparaban a los burgaleses hasta el 18-29, un buen +11 para ellos.
Respondía luego el Zamalek con otro triple para intentar recortar la desventaja, pero de nuevo Jarell Eddie, que no había descansado desde el inicio del choque, replicaba con su cuarta anotación de más allá de 6.75, cuarta de cinco intentos, para mantener al Hereda San Pablo 11 puntos arriba (21-32). Pero no todo iba bien en sus filas, ya que para entonces su rival ya había capturado hasta 8 rebotes ofensivos en la zona burgalesa, algo que de momento no empezaba a preocupar.

Y es que aunque el Zamalek se acercaba hasta el 25-32, ahí aparecía de nuevo Jarell Eddie con su quinto triple para irse hasta los 17 puntos en su cuenta particular y ver cómo le acompañaba igualmente Gamble con otra gran canasta en la botella de cuadro local (25-37, minuto 15). Estaban defendiendo muy bien el Hereda San Pablo Burgos y además seguía anotando con cierta facilidad, siendo en esta ocasión Ale Nikolic el que se unía al recital de triples para situar el 27-40.
Sin embargo, dos pérdidas en ataque -llevaba para entonces cinco el cuadro burgalés- permitieron al Zamalek enlazar un parcial de 5-0 (32-40) y Paco Olmos no esperaba más para parar el partido con su primer tiempo muerto de todo el encuentro. El minuto de reorden del juego le sentaría además muy bien a su equipo, que ahora sí anotaba en sus dos primeros ataques, por medio de Nnoko tras rebote ofensivo y Rabaseda casi colgándose del aro, y con 32-44 era ahora William Voigt, técnico del Zamalek, el que llamaba a los suyos al banquillo.
Por delante solo restaban 24 segundos para el descanso y dos tiros libres del cuadro egipcio llevaba el partido a su tiempo de asueto con diez puntos arriba para el Hereda San Pablo Burgos (34-44), que por lo tanto debería seguir construyendo su victoria en la segunda mitad.
Reacción del Zamalek y recuperación burgalesa
Tras el paso por los vestuarios era de nuevo Landry Nnoko el que empezaba a adueñarse del aro egipcio mostrándose fuerte con dos anotaciones más con las que se iba a los 12 puntos personales (38-50), pero el Zamalek empezaba a encontrar la inspiración desde la línea de tres puntos y se acercaba al 42-50 que de momento no parecía inquietar a Paco Olmos.
Y es que aunque el conjunto africano recortaría su desventaja hasta los 5 puntos (45-50), a partir de ahí el Hereda San Pablo volvería a encontrar buenas circulaciones en ataque y sendas canastas de Gamble, Rabaseda y Renfroe, estos dos últimos con sendos triples, para volver a estirar su ventaja hasta el 47-61 (minuto 28). Además, por fin empezaba a anotar Vítor Benite -sus dos primeros puntos del partido- y con 47-63 en el marcador el Zamalek paraba el encuentro. Quedaba un minuto por delante para el final del tercer parcial, pero el marcador ya no se movería.
Aparece Dani Díez y sentencia el partido
Con 16 puntos arriba iniciaría el Hereda San Pablo Burgos el cuarto final, además con la buena noticia de haber aumentado su renta a pesar de que Jarell Eddie no había anotado punto alguno en el cuarto anterior. Además, un hombre como Dani Díez, el más inspirado en ataque del equipo burgalés en sus últimos partidos, estaban con su casillero a 0, y es que los de Paco Olmos más que en ataque estaban ganando el partido en defensa.
McKinney con un 2+1 acercaba al Zamalek al 51-63 para hacer creer a los egipcios en una posible remontada, pero ahora sí, aparecía por fin Dani Díez para convertir su primer triple, estrenar su casillero y poner a los suyos de nuevo 15 puntos arriba (51-66, minuto 33). Además, reaparecía también en la zona Gamble con un mate espectacular que acompañaba Dani Díez con su segundo triple, y el Hereda San Pablo empezaba a encarrilar definitivamente el encuentro (53-71, minuto 34).
Eran ya 18 los puntos de margen para los burgaleses, que debían a partir de ese momento a jugar con tranquilidad, posesiones largas y, sobre todo, seguir firmes en defensa. Así, tras otro robo llegaba un nuevo mate de Gamble, que alcanzaba los 10 puntos y ponía el 54-73 (minuto 36), y aunque de nuevo McKinney quería erigirse en salvador de los suyos anotando un triple más, el partido empezaba a tener un claro dueño.
Con 57-75 pedía William Voigt su último tiempo muerto para intentar algo que ya era un imposible para el Zamalek quedando solo 3 minutos por delante. Unos minutos plagados además de interrupciones y poco juego, un triple de Renfroe sobre el límite de posesión anulado por los colegiados, y con el marcador de xx-xx llegaba el partido a su conclusión. El Hereda San Pablo Burgos ya está más cerca de reeditar su título de campeón de la Copa Intercontinental
FICHA TÉCNICA:
Zamalek: Mohamed Elsayed (-), Mohamed Eslam (1), Ahmed Farag (-), Mickel McKinney (15), DJ Strawberry (5), Edgar Sosa (12), Ali Hazem (1), Ike Diogu (8), Ahnas Mahmoud (7) y Moustafa Elmekawy (10).
Hereda San Pablo Burgos: Alex Renfroe (5), Tarik Phillip (13), Xavi Rabaseda (7), Jarell Eddie (17) y Landry Nnoko (13) -cinco inicial-; Ale Nikolic (3), Vítor Benite (4), Dani Díez (6), Julian Gamble (10), Max Salash (-), Marc García (-) y Kareem Queeley (-).
Árbitros: Roberto Vázquez (Puerto Rico), Rabah Noujaim (Líbano) y Wojciech Liszka (Polonia).

Parciales: 16-23, 18-21 (34-44) -descanso-; 13-19 (47-63) y 14-15 (61-78).
Incidencias: Segunda semifinal de la Copa Intercontinental 2022 disputada en el Hassan Moustafa Sports Hall de El Cairo. Presencia en las gradas de más de una cincuentena de aficionados del Hereda San Pablo.