Los escaladores serán los protagonistas en esta nueva semana de competición para el Burgos BH, que se desarrollará de forma íntegra en Francia. El equipo morado disputará dos competiciones cuyas características contrastan con las del reciente ZLM Tour. Este martes 13 de junio, participará por cuarta edición consecutiva en el CIC Mont Ventoux, donde se ascenderá en dos ocasiones el emblemático puerto alpino. Tras ello, del jueves 15 al domingo 18, centrará sus esfuerzos en otra cita de renombre como es la Ruta de Occitania.
El CIC Mont Ventoux, conocido en años anteriores como Mont Ventoux Dénivelé Challenge, mantiene un recorrido similar al de 2022. Serán en total 154 kilómetros con inicio en Vaison-la-Romaine y en los que se deberán ascender hasta seis puertos de montaña. Tras los pasos por el Col de la Madeleine, el Col de la Gabelle y Rocher du Ciré, se afrontará el primero de los dos ascensos al Mont Ventoux. Será por una vertiente más tendida, partiendo desde Sault, hasta conectar con Chalet Reynard, buscando las rampas más exigentes.
Después del descenso y de un nuevo paso por el Col de la Madeleine, se inicia la tradicional subida al Mont Ventoux desde Bédoin. En esta vertiente final, los ciclistas deberán ascender 20 kilómetros con rampas de hasta el 10% de desnivel. El Burgos BH acude con un sólido bloque de escaladores compuesto por Pelayo Sánchez, Dani Navarro, el arandino Mario Aparicio, Eric Fagúndez, Ángel Madrazo y José Manuel Díaz, que regresa a la prueba en la que debutó con el equipo burgalés en 2022.
Dos días después, el jueves, arrancará la Ruta de Occitania, en la que el Burgos BH competirá con un grupo de ciclistas casi idéntico. A estos seis corredores ya mencionados se unirá Cyril Barthe, como baza para las posibles llegadas masivas de las primeras etapas.
La oportunidad más clara de los velocistas tendrá lugar el primer día, en una jornada de 184 kilómetros entre Narbona y Gruissan mayoritariamente llana. La segunda etapa, entre Cazouls-lès-Béziers y Graulhet, estará condicionada por los ascensos iniciales al Col de Fontfroide y el Col du Montalet. Ambos ascensos podrían seleccionar el grupo, aunque se encuentran ubicados bastante lejos de la meta.
La etapa reina se disputará el sábado con inicio en Gimont y un total de 189 kilómetros rumbo a los Pirineos. El Col de Menté y el final en alto en Nistos Cap Nestès, a poca distancia de la frontera con España, serán decisivos de cara a la lucha por la clasificación general. Esta última ascensión la componen 13 kilómetros al 7% de desnivel medio. La carrera concluirá con una última jornada entre Saint-Gaudens y Saint-Girons que incluye dos puertos de montaña pasado el ecuador de la etapa: el Col de la Core y el Col de Latrape.
