La cuarta etapa de la XLV Vuelta a Burgos, de 157 kilómetros y media montaña, tendrá un final inédito en el Acebal-Vizcarra, puerto de Tercera Categoría situado muy cerca de la localidad de Pradoluengo. Bajo la nomenclatura de ‘Pueblos con Historia’ la Diputación de Burgos, que organiza la carrera a través del Instituto Provincial para el Deporte y Juventud (IDJ), dará visibilidad a localidades como Santa Gadea del Cid, de donde partirá la etapa, y otras como Frías, Trespaderne, Oña, Briviesca y Pradoluengo.
Además del último puerto, en en que estará ubicada la meta, los corredores deberán afrontar también la ascensión de otros dos puertos, también de Tercera Categoría, como son el Alto de Cubilla (Km 11) y el Portillo de Busto (Km 82).
La etapa partirá de Santa Gadea del Cid, municipio declarado Bien de Interés Cultural sobre el que destaca el monasterio medieval del Espino, y afrontará la primera dificultad montañosa de la jornada en el kilómetro 11 con la ascensión al Alto de Cubilla. Desde allí y hasta el kilómetro 82, en donde esperará el Portillo de Busto, la etapa transcurrirá por Zangández, La Aldea, Ranera, Tobera, la ciudad medieval de Frías, Cormenzana, Hedeso, la Orden y Pedrosa de Tobalina, Santotis, Trespaderne, Oña, Penches y Barcina de los Montes.
La segunda parte de esta etapa, antesala de la ascensión final a las Lagunas de Neila (Categoría Especial) que volverán a dictar sentencia en la jornada final, los corredores también pasarán por Quintanaélez, Solduengo, Barrio de Díaz Ruíz, Las Vesgas, Terrazos, Briviesca, Quintanilla San García, Cerezo de Río Tirón y Belorado, localidad en la que se disputará el Sprint Intermedio a 25 kilómetros de la línea de meta.
Una vez superado Belorado, la carrera pasará por Villagalijo para dirigirse a Pradoluengo, cuyo centro urbano dará continuidad a la etapa hasta el ‘Bosque del Calcetín’ que recuerda la industria textil del municipio y la ascensión al Acebal Vizcarra, meta de esta cuarta etapa.
