Concluyó el VIII Circuito Burgalés de Ajedrez ‘Trofeo Diputación de Burgos’ con la disputa en Cardeñadijo del último torneo puntuable que ponía el punto final a un campeonato que se ha venido desarrollando durante todo el verano. El evento fue posible gracias a la colaboración de la Delegación Burgalesa de Ajedrez, el Instituto para el Deporte y la Juventud de la Diputación de Burgos y el Ayuntamiento de Cardeñadijo.
En su renovada Plaza Mayor se dieron cita numerosos aficionados al ajedrez para participar en un torneo especialmente diseñado para ellos, mientras que en el Centro Cívico El Molino se llevó a cabo otro torneo, en este caso para jugadores federados, valedero para el ELO FIDE. Ambos torneos se desarrollaron a un ritmo rápido de 10 minutos más 2 segundos de incremento por movimiento, desafiando así la habilidad y astucia de más de 90 participantes.
En la categoría de jugadores federados, destacaron los siguientes ganadores: Iván Alonso, Andrés Iglesias y Adrián Villar, quienes demostraron su destreza con 5.5 puntos cada uno, obligando a emplear criterios de desempate. Mientras tanto, en la categoría de aficionados, Óscar Barrio se alzó con la victoria con 7 puntos, seguido de cerca por Manuel Sáez de Adana con 6.0 puntos y Álvaro García con 5.5 puntos.
La entrega de premios estuvo a cargo del teniente de alcalde Jesús Rodríguez García y el presidente de la Federación de Ajedrez de Castilla y León, Amador González de la Nava.
El Monasterio de San Agustín acoge la clausura del VIII Circuito Burgalés de Ajedrez
La entrega de premios y ceremonia de clausura del VIII Circuito Burgalés de Ajedrez se celebraría posteriormente en el Real Monasterio de San Agustín, que proclamó por este orden a los tres primeros clasificados de la general: Carlos Maté Adán, Ibai Sanz Gorrospe y José Joaquín Pinzón. Los tres demostraron su maestría en el tablero a lo largo de estos meses de verano y finalmente fueron recompensados por ello.
Además, la clausura del Circuito contó con una conferencia impartida por Amador González de la Nava, presidente de la Federación de Ajedrez de Castilla y León. Con un profundo conocimiento del ajedrez y su historia, resaltó la conexión única que Castilla y León tiene con el ajedrez a lo largo de los siglos. Mostró fotos de antiguos juegos de ajedrez, ejemplos artísticos y documentos históricos que ilustraron esta profunda conexión.
Castilla y León, rica en tradición ajedrecística, ha sido un terreno fértil para este milenario juego. Las partidas de ajedrez han resonado en estas tierras a través de generaciones, y es un juego que ha dejado su huella en la cultura y la historia de la región. La pasión y el interés por el ajedrez siguen en auge, y eventos como el VIII Circuito Burgalés de Ajedrez son un claro reflejo de este amor duradero por el juego de estrategia.
En el mismo evento estuvo presente Sonia Martínez Barrio, representante de la Diputación de Burgos y directora del Área del IDJ. Su presencia resaltó el apoyo y la implicación de las instituciones en la promoción y desarrollo del ajedrez en la región. El reconocimiento y apoyo de estas instituciones son esenciales para garantizar que el ajedrez continúe prosperando en Castilla y León.
Al cierre del evento, Daniel Ausín Matilla, delegado provincial de Ajedrez, expresó su gratitud a las instituciones y a todos los participantes. En su mensaje de cierre auguró que el próximo año el evento será aún más exitoso, destacando el récord de participación alcanzado este año. El ajedrez sigue creciendo y fortaleciéndose en la región, y la promesa de un futuro brillante para este apasionante juego de estrategia se hace más evidente con cada torneo y cada partida. Con cada movimiento en el tablero, el ajedrez sigue escribiendo su historia en Castilla y León.
