Llega uno de los retos más importantes a domicilio -los entrenadores dirían que son todos- que le restan al Burgos Club de Fútbol en la presente temporada 23-24 en la Segunda División Liga HyperMotion. A las 18.30 horas visita a la SD Éibar en el Estadio Ipurua, segundo clasificado de la categoría del que solo le separan 4 puntos, y puntuar en su feudo, ya no digamos ganar, sería posiblemente el alimento necesario que le hace falta al equipo de Jon Pérez Bolo para seguir comiendo en la mesa de los candidatos a todo.
En una cita exigente para los pupilos del técnico vizcaíno, de eso no cabe la menor duda, porque se encontrarán enfrente un conjunto armero lanzado a por el ascenso directo, que llega al choque tras haber ganado como visitante al líder, el CD Leganés (0-2), y que solo ha concedido dos derrotas (ante el Espanyol y el Leganés precisamente) y 4 empates delante de su afición.
Ante un rival así, el Burgos CF se agarra a la buena imagen demostrada en sus dos últimos partidos seguidos en El Plantío, en los que derrotaba de forma convincente al Sporting de Gijón (1-0) y el Cartagena (3-0) sin recibir gol alguno, para seguir siendo el único equipo invicto como local de toda la categoría de plata del fútbol español
Bajas de Joni Montiel, Raúl Navarro, Esteban Saveljich y Löic Badiashile
Tras su último entrenamiento de la semana llevado a cabo este sábado, en el Burgos se mantienen las ausencias de los lesionados Raúl Navarro y Esteban Saveljich -ni en el caso del primero se espera un regreso cercano- y a ellos se les unen también Joni Montiel, sancionado con un partido por la tarjeta roja directa vista ante el Cartagena tras propinar un codazo en el pecho a un rival; y el portero francés Löic Badiashile, con permiso del club tras ser padre esta misma semana.
El madrileño había sido suplente en dicho encuentro -fue expulsado a los 4 minutos de pisar el césped de El Plantío- y por lo tanto no se esperan especiales cambios en el once inicial que pueda disponer Bolo, aunque en esta ocasión es muy posible que presente en el medio campo tres mediocentros de agarre, de pelea, con un dibujo 4-2-3-1 que le incomode todo lo posible al Éibar.
Además, los blanquinegros contarán con el apoyo desde la grada de más de 300 seguidores burgalesistas que el pasado martes agotaban las entradas puestas a disposición por el club guipuzcoano en menos de dos horas, y por lo tanto el calor de sus gargantas lo tienen asegurado.
