El Recoletas Burgos Caja Rural Aparejadores ha presentado este martes de forma oficial la final de la Supercopa de España 2024 que disputará este domingo en el Estadio Nueva Balastera de Palencia (12.00 horas) ante el VRAC Quesos Entrepinares de Valladolid. Es la misma final que la temporada pasada y el equipo burgalés intentará reeditar su título.
La presentación de la Supercopa ha tenido lugar en el Hospital Recoletas Burgos, uno de los principales patrocinadores del Aparejadores, y ha contado con la presencia de su directora gerente, Pilar Gómez; el presidente del Aparejadores Burgos, Manolo Vadillo; uno de los entrenadores del equipo, José Basso; y el jefe de los Servicios Médicos del club burgalés, Jacobo Salvat.
Una puesta de largo de la competición a nivel local en la que el Recoletas Burgos Caja Rural ha presentado la nueva camiseta para esta temporada, y que estrenará en la final, y en la que Manolo Vadillo ha mostrado su confianza en que serán más de 1.000 los seguidores del equipo burgalés que estarán presentes en la Nueva Balastera.
«Como mínimo esperamos un desplazamiento como el del año pasado a Valencia en la final de la Copa del Rey. Ocurre que al ser tan cerca de Burgos, hay muchos de nuestros aficionados que están esperando hasta última hora para decidir finalmente si van o no al partido», señalaba el presidente del Aparejadores, confiando en que puedan superar el millar de aficionados apoyándoles desde las gradas.
Valentín Bustos, lesionado, se perderá la final
Por su parte, José Basso confirmaba que no podrán contar con el concurso de Valentín Bustos, que sigue apurando el proceso de recuperación de la lesión que sufrió la pasada temporada, y respecto a su equipo reconocía que tiene claras diferencias con respecto al de la pasada temporada.
«Hemos modificado la columna vertebral, sobre todo en el liderazgo, ya que se han marchado jugadores como Santi Gramajo, Tomi Carrió, Rubén Sanz y Nicolás Walker, que eran cuatro líderes dentro del equipo. A partir de ahí hemos trabajado en la pretemporada es construir una estructura que pueda responder igual que la que ya teníamos hecha. No tenemos dudas de que los vamos a conseguir y que la toma de decisiones será lo más certera posible», afirmaba Basso.
Que la final de la Supercopa de España se juegue en Palencia, cerca de Burgos y Valladolid, ciudades de los dos finalistas, le parece al entrenador del Recoletas Burgos Caja Rural muy acertado. «Es algo maravilloso que haya equipos de Castilla y León dominantes desde hace años en el rugby español. Que podamos disfrutar de estadios como la Balastera es hermoso, y si en la Copa del Rey del año pasado se vivió un ambiente fantástico en Valencia, ahora espero una fiesta mucho más propia y más nuestra. Es muy positivo jugar en un estadio así, tan grande. Influirá de manera positiva, seguro», concluía José Basso.
