El Deportivo de la Coruña puso fin a la buena racha del Burgos con un tanto de Mario Soriano en la segunda parte anulando por completo a un Burgos que fue mucho más activo en la primera mitad pero que no tuvo acierto de cara a portería, algo que pagó muy caro, con una derrota que no sólo no permite sumar sino que al ser contra un rival directo, los gallegos pasan en la clasificación al conjunto de Luis Ramis.
Afrontó el Burgos con tres novedades en su once inicial, en el que entraban Anderson Arroyo en el lateral derecho en lugar de Pipa, además de Morante y Mario Cantero en la medular en sustitución de Dani Ojeda y el lesionado Marcelo Expósito, que con una rotura de fibras sufrida en la pasada jornada ante el Granada deberá descansar al menos dos o tres semanas. Mientras, los otros ocho jugadores elegidos por Luis Miguel Ramis repetían titularidad.

El inicio del partido estuvo marcado por un ritmo pausado, con ambos equipos buscando asentarse sobre el terreno de juego. A los seis minutos, Espiau tuvo la primera ocasión del encuentro, pero el delantero canario no estuvo acertado en su remate y Helton, el portero rival, intervino sin complicaciones. Desde los primeros minutos, el Burgos apostó por un juego directo que dificultó las transiciones del Deportivo, que no lograba encontrar su ritmo habitual y en ataque Íñigo Córdoba mostró su habilidad al desbordar por la banda, aunque José Ángel logró cortar a tiempo. El Deportivo tuvo una aproximación destacada en el minuto 18, cuando Soriano condujo el balón hasta el área contraria y Ximo Navarro centró con precisión. Sin embargo, Barbero no logró conectar con el balón y la ocasión se desvaneció. El Burgos siguió presionando y generando jugadas, y fue nuevamente Espiau quien estuvo cerca de abrir el marcador tras un pase de Córdoba, pero su disparo se fue desviado.

El Burgos optó por replegarse y ceder la posesión al Deportivo, confiando en su defensa para frenar las llegadas del conjunto de Gilsanz. A pesar de no dominar el balón, los de Ramis mostraron una gran organización defensiva, dificultando las combinaciones del Depor y evitando que pudieran encontrar espacios para generar peligro. La táctica del Burgos era clara: robar el balón y salir a la contra con rapidez. En una de estas jugadas, Íñigo Córdoba intentó sorprender, pero Pablo Vázquez estuvo atento y logró proteger bien la pelota, frustrando el intento.
El Deportivo, por su parte, asumió el control del juego, llevando la iniciativa y buscando constantemente la forma de quebrar la resistencia burgalesa. Sin embargo, el equipo local se mantenía firme y no permitía que pudiera articular su estilo de juego. A medida que avanzaba el partido, los de Gilsanz eran quienes dictaban el ritmo, pero el Burgos esperaba pacientemente su oportunidad, sabiendo que cualquier error del rival podría ser aprovechado para dar el golpe definitivo.

Los de Ramis supieron presionar y aprovechar las dudas en la defensa del Deportivo. En uno de esos momentos, Helton salvó a su equipo tras una serie de indecisiones en la zaga gallega, que no lograba despejar con claridad. A pesar de los esfuerzos del Burgos por tomar la iniciativa, el frío en la sombra de El Plantío afectó a la fluidez de su juego. Sin embargo, Curro se animó a lanzar a puerta, aunque sin éxito. Fueron muchos minutos en los que el Burgos se mostró superior en cuanto a intensidad y control, creando varias situaciones peligrosas. Una de las más claras llegó con Morante, quien se cayó dentro del área tras un centro de Iñigo Córdoba, pero el árbitro no sancionó penalti y el juego continuó. La presión alta, generó más incertidumbre en la defensa del Depor, que no lograba salir con claridad desde atrás. Esta presión permitió a los locales lanzar varios balones largos hacia Espiau, quien atacaba constantemente. En dos ocasiones, el canario se encontró con un Pablo Vázquez flojo en defensa, pero sus disparos no encontraron portería: el primero se fue alto y el segundo, tras un pase largo, terminó fuera.

La segunda mitad comenzó con un Deportivo mucho más intenso, que en tan solo tres minutos dispuso de su primera ocasión clara. Barbero, tras una buena jugada colectiva, soltó un disparo que rozó el primer gol de la tarde, pero Ander Cantero, el guardameta del Burgos, apareció con dos intervenciones clave para evitar que el balón entrara en su portería, salvando a su equipo en momentos de máxima tensión. Los de Ramis salieron con más fuerza, generando más peligro y siendo más incisivos. Yeremay estuvo cerca de abrir el marcador con un potente disparo que se estrelló contra la defensa del Deportivo, dejando claro que el Burgos no iba a ceder terreno fácilmente.
Con el paso de los minutos, Luis Miguel Ramis optó por un cambio en su esquema y dio entrada a Álex Sancris, quien volvía de una lesión, en lugar de Mario Cantero. La idea del entrenador burgalés era jugar más directo hacia la portería rival, buscando aprovechar la velocidad y el dinamismo de Sancris para desequilibrar a la defensa del Depor.

En los momentos decisivos de la segunda parte, el Burgos vivió una situación de gran tensión cuando Ander Cantero cometió un error en una salida que estuvo a punto de costarle caro a su equipo. El portero no logró despejar un balón con claridad, pero David López intervino con una gran acción defensiva para evitar el gol tras el despiste de su guardameta. A pesar de esa salvada, el Deportivo se mostraba más cercano al gol. En una jugada por la banda derecha, Ximo Navarro lanzó un centro que no pudo conectar Lucas Pérez, quien acababa de ingresar al campo, pero sí Mario Soriano, que llegaba desde atrás para empujar el balón y romper la portería burgalesa. El gol dejó al Burgos en desventaja y obligó a Luis Miguel Ramis a modificar su estrategia para buscar la remontada.

El entrenador del Burgos reaccionó de inmediato, cambiando el sistema de juego para apostar por más hombres en ataque. Sacó a Fer Niño en sustitución de Morante, dando entrada a más potencial ofensivo, y siguió buscando el empate con la entrada de Dani Ojeda. El equipo local no se rendía y, con más empuje que claridad, continuaba buscando la portería rival. A punto estuvo de lograrlo Álex Sancris, quien conectó un potente zurdazo desde la frontal del área, pero Helton estuvo atento y despejó el balón con una gran intervención.

El Burgos no logró desarmar la sólida defensa del Deportivo, que se mostró firme y muy bien organizada en los últimos minutos del encuentro. A pesar de los esfuerzos del equipo local, fue Álex Sancris quien mantenía la esperanza, intentando generar peligro con centros que buscaban a Espiau y Fer Niño, pero el Depor se reforzó en defensa para neutralizar estos intentos. En los instantes finales, el Burgos apretó en busca del empate, y Sancris, con la pelota en los pies, volvió a asistir a Fer Niño en una jugada clave. Sin embargo, el delantero no pudo concretar, estrellando el balón contra el cuerpo de Jaime, el defensor del Deportivo, que se interpuso en su remate. Así, el partido se cerró con una victoria ajustada para los gallegos, quienes supieron mantener su ventaja hasta el pitido final, dejando al Burgos con la frustración de no haber logrado el gol del empate.
FICHA TÉCNICA:
Burgos Club de Fútbol: Cantero; Arroyo (Pipa m.80), Aitor Córdoba, David López, Florian; Atienza; Curro Sánchez, Mario Cantero (Alex Sancris m.56), Morante (Fer Niño m.70), Íñigo Córdoba (Dani Ojeda m.80); y Edu Espiau.
Deportivo de La Coruña: Helton Leite; Ximo Navarro, Pablo Vázquez, Pablo Martínez, Obtrador; David Mella (Gauto m.92), Mfulu (Lucas Pérez m.63), José Ángel, Yeremay (Petxarroman m.92); Mario Soriano (Jaime Sánchez m.85) y Barbero (Villares m.63).
Árbitro: Ais Reig (Colegio Valenciano). Amonestó a Curro (m.73), Córdoba (m.78) por el Burgos; y a Ximo Navarro (m.13), Mfulu (m.50) por el Deportivo.
Goles: 0-1 (minuto 70): Mario Soriano
Incidencias: Partido de la Jornada 23.ª de la Segunda División Liga HyperMotion disputado en el Estadio El Plantío ante 11.050 espectadores, entre ellos unos 1.200 seguidores del Deportivo de La Coruña.