El Estadio de El Sardinero será este domingo el escenario donde se dispute el primer asalto de una eliminatoria cargada de emoción y expectativas. Racing de Santander y CD Mirandés se enfrentan en el partido de ida de las semifinales del playoff de ascenso a Primera División, en un duelo que promete intensidad, estrategia y 180 minutos de máxima tensión.
El conjunto rojillo llega a esta cita histórica con la moral en lo más alto tras firmar una temporada de gran nivel en LaLiga Hypermotion, donde llegó a depender de sí mismo para lograr el ascenso directo. Aunque finalmente no logró esa plaza privilegiada, el Mirandés ha demostrado ser uno de los equipos más competitivos del campeonato y quiere confirmar su gran momento con una gesta que le acerque al fútbol de élite.
El rival no será fácil. El Racing de Santander, que terminó en quinta posición, consiguió sellar su clasificación para la promoción en las últimas jornadas, en un final de temporada apretado donde tuvo que batirse con el Granada directamente por meterse en el playoff. Aunque los cántabros estuvieron cerca de quedarse fuera, ahora afrontan la eliminatoria con la ambición de volver a una categoría que conocen bien.
El Mirandés confía en su estilo y en el factor Anduva
Para el Mirandés, el enfrentamiento supone una oportunidad de oro para seguir agrandando su historia. Los dirigidos por Alessio Lisci llegan a esta semifinal con su característico juego valiente, intenso y atrevido, que ha sido la seña de identidad del equipo durante toda la campaña. El técnico italiano espera contar con toda la plantilla disponible y ya ha dejado claro que no renunciarán a su estilo, tampoco en un campo tan exigente como El Sardinero.
Los rojillos buscarán un resultado positivo fuera de casa que les permita encarar con garantías el partido de vuelta en Anduva, donde han sido prácticamente inexpugnables: solo un equipo ha logrado vencer allí a lo largo de toda la temporada, el Granada. El resto del balance son 5 empates y 15 victorias. El estadio mirandés será clave si el equipo llega con opciones de sellar el pase a la gran final.
El Racing parte con la historia a su favor, pero con un aviso reciente
Aunque los antecedentes históricos sonríen al Racing, los últimos enfrentamientos entre ambos equipos dan alas al Mirandés. En la presente temporada, el conjunto rojillo logró imponerse en los dos encuentros ligueros ante los cántabros, lo que refuerza su confianza de cara a este playoff. Sin embargo, en eliminatorias de este tipo, los pequeños detalles y los errores puntuales pueden resultar decisivos, y cualquier despiste puede costar muy caro.
El conjunto santanderino, por su parte, se aferra a su fortaleza como local, al empuje de su afición y al peso de su historia para intentar encarrilar la eliminatoria en casa. Bajo la dirección de José Alberto López, un viejo conocido de la afición jabata, el Racing ha demostrado tener capacidad para competir en los momentos importantes, y sabe que marcar la diferencia en El Sardinero podría ser fundamental.
El ambiente será eléctrico en las gradas de Santander, donde se espera una gran entrada y una afición entregada que empuje a los suyos en un encuentro de enorme trascendencia. En juego, ni más ni menos que el primer paso hacia un ascenso que cambiaría el rumbo de cualquiera de los dos clubes. Con 90 minutos por delante este domingo, y otros 90 en Miranda el próximo jueves, la eliminatoria está abierta. Mirandés y Racing, dos equipos con estilos distintos pero con el mismo objetivo: ser de Primera.
