- El próximo martes 26 de mayo comparecerá por videoconferencia de prensa César Rico, presidente de la Diputación Provincial de Burgos, para comunicar de forma oficial y definitiva si se disputará o no la Vuelta a Burgos.
El pasado martes 19 de mayo la Unión Ciclista Internacional (UCI) ofreció por segunda vez en las últimas semanas su calendario de competición de la temporada 2020, reseñando que el mismo arrancaría a finales del mes de julio con la disputa en fechas muy parecidas y coinicidentes del Tour de Qinghai Lake (China) y la Vuelta a Burgos, prevista para celebrarse entre el 28 de julio y el 1 de agosto (5 etapas).
La confirmación de su presencia definitiva en el calendario internacional aireó el optimismo en cuanto a la disputa de la ronda burgalesa, que hasta ese momento se encontraba pendiendo de un hilo, y entre su comité organizador, comandado por los técnicos del Instituto para el Deporte y la Juventud de la Diputación Provincial de Burgos, con Marcos Moral a la cabeza como director general de la Vuelta a Burgos, empezó a cundir un cierto optimismo.
Sin embargo, la responsabilidad final sobre su celebración recae en pleno sobre toda la institución provincial, que es la que soporta la mayor parte del presupuesto de la prueba, y llamó la atención que al día siguiente -el pasado miércoles- su presidente, César Rico, no hiciera declaraciones al respecto y emplazara a los medios de comunicación a una rueda de prensa por videoconferencia que tendrá lugar el próximo martes 26 de mayo.
En una clara intención de ganar tiempo, lo que pretendía con ello es poder poner encima de la mesa todos los pros y los contras en torno a la disputa de la Vuelta a Burgos a finales del próximo mes de julio, y poder consultar al mismo tiempo a los demás grupos políticos y algunos de los alcaldes por cuyas localidades debería pasar la ronda burgalesa (salidas, metas o tránsito nada más).
En la cuerda floja
Unas conversaciones que se han ido pruduciendo durante estos últimos días y que desde el punto de vista positivo han recogido opiniones tendentes a la transcendencia internacional que tendría Burgos por ser su carrera la que diera el banderazo de salida a las competiciones ciclistas de carácter internacional en esta segunda parte de la temporada 2020. Sería la mejor forma de ‘vender’ Burgos al resto del mundo.
Por contra, opiniones totalmente encontradas, más afines a la realidad actual, con una crisis sanitaria y económica debido a la pandemia del COVID19 que obligará a todas las localidades de la provincia, y también a la Diputación Provincial de Burgos, a realizar un esfuerzo en la gestión que haría recomendable destinar para ello el presupuesto inicialmente destinado para hacer posible la disputa de la Vuelta a Burgos.
Por eso su celebración entre el 28 de julio y el 1 de agosto se mantiene aún en el aire y quizá ahora mismo esté más cerca de su suspensión definitiva -extremo que algunos medios ya dan por hecho- que de su celebración.
No es algo que a Forofos Burgos le conste y por lo tanto este medio de comunicación seguirá pendiente de que se produzca una confirmación definitiva al respecto, en uno u otro sentido. La expresión ‘Ya lo dijo Forofos Burgos’ hace tiempo que dejó de preocuparnos.
