- Remco Evenepol (Deceuninck Qjuick Step) continúa al frente de la clasificación general de la ronda burgalesa, que no sufre variaciones en sus primeros puestos, manteniendo 18 segundos de ventaja sobre George Bennet (Jumbo Visma) y 32 sobre Mikel Landa (Bahrain) a la espera del desenlace final de este sábado en las Lagunas de Neila.
El irlandés Sam Bennet, del equipo Deceuninck Quick Step, se ha impuesto este viernes en Roa de Duero, meta de la cuarta etapa de la Vuelta a Burgos que había partido desde Gumiel de Izán para completar un total de 163 kilómetros, al ser el más fuerte en la llegada al sprint que decidió la resolución de la jornada.
Una etapa protagonizada por una nueva escapada creada prácticamente desde el banderazo inicial de la salida, fuga integrada por seis corredores entre los que estaba Willie Smit, del Burgos BH, pero que acabó siendo neutralizada por el pelotón a solo 12 kilómetros de la meta.
El belga Remco Evenepoel, compañero de equipo del vencedor de la etapa, se mantiene al frente de la clasificación General Individual a la espera de lo que acontezca mañana en las Lagunas de Neila, cima de la quinta y última etapa de la Vuelta a Burgos.
Salida y escapada de seis unidades para empezar el día
Finalizado el protocolo de la presentación de todos los corredores en la magnífica sede de las Bodegas Nabal, en Gumiel de Izán, con gran presencia de aficionados acercados desde esta misma localidad burgalesa y otras adyacentes, y con la asistencia destacada en esta jornada del presidente de la Real Federación Española de Ciclismo, José Luis López Cerrón, se procedió a dar la salida de la etapa, tomada por 143 de los 152 corredores que iniciaron el pasado martes la Vuelta a Burgos.
Y para no variar a la costumbre de las etapas precedente, nada más darse la salida se gestó la escapada del día, formada inicialmente por cinco corredores a los que pocos kilómetros después se les unió un sexto invitado, Txomin Juaristi (Euskaltel Euskadi). Junto a él, tres ciclistas del Kometa Xtra, Diego Pablo Sevilla, Ricardo Verza y Alejandro Ropero; uno del Gazprom, Damiano Cima; y, cómo no, otro hombre del Burgos BH, en este caso el sudafricano Willie Smit, que ha lo había intentado también en la primera etapa.
Con buen ritmo empezaron la cabalgada, que desde el primer momento contó con el beneplácito del pelotón, y al pasado por Villanueva de Gumiel (Km. 4) su renta ya era de 2’50´´, con lo que quedaban claras las intenciones de unos y otros. La fuga estaba montada y ahora, como todos los días, había que esperar a ver cuál sería su máxima ventaja y a cuantos kilómetros de la meta sería neutralizada por el gran grupo.
El entendimiento entre los seis aventureros de la jornada fue perfecto durante la primera hora de carrera y enseguida consiguió la que sería su máxima renta de todo el día, los 4’44´´ logrados en el km 8, una desventaja no demasiado preocupante pero que, extrañamente, el pelotón ya no permitió que creciera más.
Comandado por corredores del equipo del líder, el Deceuninck Quick Step de Remco Evenepoel, a los que ayudaba también en los relevos el Groupama FDJ del esprinter francés Arnaud Demare, interesado en una llegada masiva en las calles de Roa de Duero, el grupo empezó a controlar con tranquilidad la escapada para evitar sorpresas de última hora.
Así, a partir del km 36, al paso por la bonita localidad burgalesa de Peñaranda de Duero, donde la ventaja de los escapados era aún de 4’10´´, su renta iría poco a poco, lentamente pero de forma segura, menguando para tranquilidad de los perseguidores y la preocupación de quiénes querían obrar la hombrada en su intento de presentarse en la meta para jugarse entre ellos la victoria.
Aun así, entre los fugados, con triple presencia del equipo Kometa Xtra, la fuerza de piernas se mantenía viva, y al atravesar Aranda de Duero (km 75) su margen seguía siendo de 3’02´´, un tiempo aún interesante, pero a todas luces realmente escaso si, como se esperaba, los equipos con velocistas en sus filas empezaban a tocar zafarrancho en la cabeza del pelotón.
Y, efectivamente, eso es lo que pasó. A medida que la ventaja iba menguando, la fuga empezaba a perder unidades, siendo el primero en descolgarse para ser devuelto a la disciplina del grupo el último en llegar, Txomin Juaristi; al que le siguió tiempo después, una vez que los corredores hacían un primer paso por la meta de Roa de Duero (a 36 kilómetros del desenlace final), el corredor del Kometa Ricardo Verza
Así, de los seis hombres que integraban la fuga inicial ya solo quedaban cuatro, un cuarteto que en los kilómetros finales, ya encaminado hacia la meta y viendo cómo su ventaja seguía menguando (2’10´´ al paso por Olmedillo de Roa, aún a 46 km de la meta), acabaría perdiendo otras dos unidades.
La primera de ellas la de Willie Smit (Burgos BH), que arrojó la toalla a 31 kilómetros para el final con una renta de los escapados de 1’30’’, y la segunda la del italiano Damiano Cima (Gazprom), que optó por volver a la tranquilidad del grupo para dejarles ya la aventura, en un mano a mano de equipo, a dos de los tres fugados del Kometa Xtra, Diego Pablo Sevilla y Alejandro Ropero.
Y la verdad es que lo dieron todo, al menos todo lo que les quedaba en el cuerpo, pero a 12 kilómetros de Roa fueron definitivamente neutralizados por un pelotón con velocidad de crucero que ya solo pensaba en una llegada masiva que pusiera el punto final esperado a la cuarta etapa de la Vuelta a Burgos.
Caída en el último kilómetro y triunfo de Sam Bennett
Y así, con el control de los equipos interesados en ella, Groupama (Arnaud Demare), UAE Team Emirates (Fernando Gaviria) y NTT Pro Cycling (Giacomo Nizzolo) principalmente, la etapa entró en su tramo final, que aguardaba aún una última sorpresa. Y es que en el mismo arco que indicaba el inicio del último kilómetro se producía una caída y esta acababa suponiendo el fin de las esperanzas para varios de los corredores interesados en la victoria.
No así para el primero en cruzar y girar a derecha en ese mismo arco del kilómetro final, el irlandés Sam Bennett, que aprovechó su gran punta de velocidad para tirar de ella en una llegada que claramente picaba hacia arriba. De hecho nadie pudo seguirle y su triunfo en Roa de Duero fue a buen seguro mucho más placentero del que nunca hubiera podido imaginar.
Tras él, pero a 4 segundos, el francés Arnaud Demare (Groupama) y el italiano Giacomo Nizzolo (NTT Pro Cycling) confirmaban que eran candidatos al triunfo, pero la influencia de la caída había frenado la posibilidad de que hubieran girado más pegados a Bennett.
General Individual sin variaciones
En cuanto a la clasificación general, esta no sufre variaciones y sigue liderada por el belga Remco Evenepoel (Deceuninck Quick Step) con 18 segundos de ventaja sobre el neozelandés George Bennett (Jumbo Visma) y 32 sobre el español Mikel Landa (Bahrain).
