- Los cerca de 7.000 abonados del Burgos Club de Fútbol SAD agotan las 4.777 localidades puestas a su disposición, el máximo permitido por el 40% autorizado por el actual protocolo anti COVID19 regulado por la Junta de Castilla y León.
Todo está preparado en el Estadio El Plantío para que este domingo, en sesión nocturna de las 22.00 horas, el Burgos Club de Fútbol se estrene como local en la Segunda División Liga SmartBank para recibir nada más y nada menos que a la SD Éibar, un club que se estaba ganando ya la vitola de clásico de Primera pero que el pasado mes de mayo escribía su descenso desde la máxima categoría del fútbol español.
Atrás queda el 19 de mayo de 2002, día en el que el conjunto blanquinegro, entonces dirigido por Enrique Martín, perdía como local ante el Real Murcia (0-1) en la penúltima jornada de la temporada 2001-02, solo dos meses antes de que finalmente no lograra convertirse en Sociedad Anónima Deportiva y fuera por ello descendido de golpe a la Segunda División B.

Desde entonces, el Burgos CF había estado deambulando entre dicha categoría y la Tercera División, pero ahora, 19 años después, regresa a su remodelado estadio como local para volver a jugar ante su público un partido de la Segunda División y hacerlo con la misma ilusión que un niño con zapatos nuevos, aunque con menos seguidores animándole de los que le hubiera gustado tener en las gradas.
El protocolo sanitario y de seguridad vigente actualmente, y que la Junta de Castilla y León prorrogaba este pasado viernes por al menos 15 días más, permite únicamente la ocupación de un 40% del aforo en las instalaciones deportivas al aire libre, y por eso de los cerca de 7.000 abonados actuales con los que cuenta el Burgos CF SAD, esta noche solo podrán darse cita para presenciar el encuentro 4.777, lo máximo que se le ha permitido a la entidad burgalesista.

Dos equipos en busca de su primer triunfo
En cualquier caso, 4.777 gargantas que a pesar de la hora (diez de la noche) animarán sin parar desde el primer al último minuto deseosos de ver la primera victoria del curso de su equipo, que se estrenaba hace dos jornadas perdiendo por la mínima ante el Sporting de Gijón (1-0) y empataba (0-0) el pasado lunes en el feudo del CD Leganés tras jugar más de 70 minutos en inferioridad numérica.
Dos buenas puestas en escena, en cualquier caso, que le han proporcionado un mayor rédito (1 punto) que al rival que tendrá el Burgos enfrente, el Éibar, que a pesar de partir de entrada como uno de los clubes favoritos al ascenso, a recuperar la categoría en la que ha militado las últimas temporadas; no sabe de momento lo que es puntuar.
El conjunto armero, dirigido ahora por Gaizka Garitano -ex entrenador del Athletic de Bilbao- se estrenó en Huesca, ante otro recién descendido, perdiendo por 2-0, en tanto que en la segunda jornada caía sorprendentemente como local en Ipurúa ante la Ponferradina (0-1). Un duelo en el gozó de las suficientes ocasiones para marcar, varios disparos al poste y un par de goles anulados, pero en el que no tuvo el santo de cara.

Grego Sierra, única baja blanquinegra
En el Burgos CF, que este viernes por fin pudo ejercitarse sobre el nuevo terreno de juego de El Plantío, Julián Calero, su técnico, podrá contar con todos sus jugadores a excepción de uno, el defensa central Grego Sierra. Su expulsión por roja directa en Leganés fue castigada por el Comité de Competición con 2 partidos y por lo tanto es el único que no estará disponible para el técnico madrileño.
El resto de futbolistas, un total de 21, sí estarán a su disposición, y entre ellos habrá que ver cuál es la apuesta como local por la que finalmente se decanta su entrenador. Ante el Sporting y el Leganés apostó por un sistema claro de 4-1-4-1 que podría mantener, con Elgezabal de pivote entre la zaga y la línea medular; pero también, al jugar como local, podría cambiar a un dibujo un poco más ofensivo, el del clásico 4-4-2 con dos hombres en punta.
Además, está por ver si tras la llegada esta semana de José Antonio Caro, que se incorporaba el pasado martes a los entrenamientos, hay cambio en la portería, defendida en las dos primeras jornadas -y con un gran acierto- por Alfonso Herrero. Caro viene de ser titular en las dos últimas campañas con la Ponferradina y podría ser esta noche la apuesta de Calero.

Mientras, el Éibar contará con la baja del defensa sudafricano Noko Matlou, lesionado en una rodilla, y se presentará en El Plantío con una convocatoria de 22 jugadores de la que saldrá la apuesta de Gaizka Garitano.